Sábado 19 de septiembre de 2015, p. 7
Buenos Aires.
Berlín, la capital alemana, ¿centro de efervescencia cultural, faro de nuevas tendencias, epicentro del underground?Definitivamente no es lo que era
, cuenta en entrevista la coreógrafa argentina Constanza Macras, quien emigró a Alemania hace 20 años y vivió la metamorfosis de la ciudad en paralelo a su salto profesional.
“En los años 90 del siglo pasado había muchísimas casas tomadas”, recuerda la artista, que ayer se presentó en Buenos Aires. En Alemania aquel fenómeno de okupas iba de la mano de iniciativas del under, de colectivos de artistas, de la ebullición experimental en sótanos y pisos compartidos de un Berlín que se había alimentado, durante décadas, de quienes buscaban alquileres económicos y huían del servicio militar.
Ahora la ciudad es un gran hallazgo inmobiliario
, describe Macras esa gentrificación que ha avanzado a paso firme.
Y es que, al ser declarada de nuevo capital de la Alemania reunificada, el auge inmobiliario expulsó de la metrópoli a artistas experimentales de pocos fondos y soterró muchos de los espacios en los que la falta de recursos genera(ba) creatividad, formas creativas de solucionar cosas simples
, observa la coreógrafa.
Tal vez esa mirada, que parecería nostálgica o un deseo por atrapar un Berlín artísticamente pujante que se esfuma, es resintetizada por Macras en una obra dedicada a la realidad de los paisajes urbanos que avanzan sin volver atrás
.
Así es como describe el núcleo de The Past, obra con la que se presenta en Buenos Aires junto a su compañía, Dorky Park, integrada por bailarines profesionales y amateurs con edades de cuatro y 72 años.
Complicada relación con el pasado
¿Cuál fue el disparador de la obra? La relación entre arquitectura, memoria y retórica
, cuenta Constanza Macras.
La coreógrafa, quien admite tener una relación complicada
con su propio pasado en Argentina, observa cómo los recuerdos están intrínsecamente ligados a veredas, monumentos, construcciones y arquitecturas transitadas.