Con sólo 30 años de edad y cuatro hijos pequeños que dependían de ella, Consuelo Patricia Mada Duarte fue diagnosticada con cáncer de mama; aunque al principio se sintió devastada, el amor por su familia le dio las fuerzas y coraje necesario para hacer frente a la enfermedad y luchar por su vida.
Hoy en día, a 32 años de distancia, esta sobreviviente comparte su experiencia con quienes enfrentan la misma situación y las alienta a no dejarse vencer; además trata de crear conciencia entre todas las mujeres para que aprovechen toda la información y equipo médico con el que actualmente se cuenta en las asociaciones e instituciones de salud para prevenir y detectar oportunamente este padecimiento.
Hace 32 años no había difusión alguna sobre el cáncer de mama, su prevención o detección. Yo llegué al Hospital General porque me encontré una bolita, ahí me dijeron que podía ser una bolita de grasa, pues mi hija menor tenía un año de edad y acababa de terminar de lactarla, además estaba yo muy joven… Me hicieron una biopsia y el tumor dio positivo al cáncer, aunque no me lo dijeron”, recordó.
Fue una enfermera del nosocomio la que le recomendó no irse del lugar sin que le confirmaran si se trataba o no de un tumor cancerígeno y fue así como se enteró de la noticia que le cambió la vida.
“Yo le debo mi vida a esa enfermera que me dijo que no me fuera sin que me confirmaran si era cáncer. Ya con el diagnóstico, mi familia decidió llevarme a Estados Unidos para que me operaran”, narró.
Aunque siempre mantuvo su fortaleza, al llegar al hospital del vecino país Consuelo recibió por parte del personal médico una noticia que si bien le causó impacto, no le quitó las ganas de luchar por su vida: Tendrían que extirparle todo el seno.
Su lucha no terminó ahí, después de la operación la entonces joven madre de familia recibió radiaciones y siguió al pie de la letra las instrucciones de los médicos, hasta que finalmente logró ganar la batalla y continuar con su vida.
A 32 años de esa experiencia, Consuelo se dedica a concientizar a las personas, hombres y mujeres, sobre la importancia de aprovechar la difusión que en sus tiempos de juventud no existía para prevenir el cáncer o detectarlo a tiempo, mientras aún es curable.
“Siempre visito a personas que están luchando con algún tipo de cáncer, no sólo de mama y les digo que si se les tiene que caer el pelo, luego les crecerá; que tienen que comer bien para aguantar las quimioterapias, que sean positivos y le echen ganas… A las mujeres jóvenes les digo que hagan un alto en sus vidas caóticas para que se hagan las pruebas para detectar a tiempo, que piensen en que son los pilares de sus familias”, destacó.
FALTAN MASTÓGRAFOS EN SONORA
Aunque la invitación para que las mujeres se realicen exámenes para detectar oportunamente el cáncer de mama es constante, en Sonora sólo se cuenta con seis mastógrafos distribuidos en cuatro municipios, admitió el secretario de Salud en el Estado, Gilberto Ungson Beltrán.
Precisó que de estos aparatos, tres se encuentran en hospitales y clínicas de Hermosillo, y uno en Navojoa, Ciudad Obregón y San Luis Río Colorado, respectivamente.
Sin embargo aseguró que buscarán que se presupuesten recursos para adquirir un número mayor que permita equipar centros de salud, nosocomios, clínicas del Seguro Popular y unidades móviles médicas de municipios cercanos a las comunidades más alejadas.
“Sabemos que hay mujeres que viven en comunidades alejadas de las principales ciudades que, por falta de recursos, no acuden a realizarse la mamografía… Estamos por disponer de un mastógrafo en Moctezuma y buscaremos que se pueda equipar a municipios de la sierra y Río Sonora para que se trasladen hasta ahí quienes vivan en comunidades cercanas”, indicó.