Si se permite la informalidad en la venta de autos usados, además del riesgo que implica para la sociedad, se cerrarán más negocios establecidos formalmente.
Por lo que Efrén Rosas Leyva, apuntó que el presente año ya se cerraron dos negocios de los 17 establecidos en Cajeme.
El presidente de la Asociación de Comerciantes de Autos Usados de Ciudad Obregón, hizo un llamado al presidente municipal Faustino Félix Chávez para no dar marcha atrás a los logros obtenidos después de más de seis meses de lucha en la pasada administración para sacar de las calles a los vendedores de autos.
“Es una competencia desleal que viene a afectar aún más la economía de este sector, que se suma al incremento del dólar frente al peso y el alto costo de importación para la entrada de vehículos de Estados Unidos”, refirió.
Puntualizó que actualmente la importación de autos de Estados Unidos a México tiene un costo de 34 mil pesos, que está originando la entrada indiscriminada de los llamados “chocolates”, y no sólo de vehículos de trabajo, sino de lujo que tiene un costo de 5 a 6 mil dólares.
Comentó que desde la semana pasada se han visto lotes de carros estacionados con la leyenda de “se vende”, en las calles Guerrero y Quintana Roo, así como en Miguel Alemán y Náinari, tanto de vehículos importados, como con placas “pafas”.
Reiteró la demanda a las autoridades para frenar la competencia desleal y llamó a los comerciantes a establecerse y cumplir con el pago de impuestos.