Después de 39 horas de velación, fue sepultado y con música se recordó los logros familiares y sociales que vivió tras mantenerse siempre activo, sonriente y luchador.
Las ganas de salir adelante y de superar la obesidad mórbida que padecía, quedaron como una evidencia al conocerse la historia del hombre de 37 años considerado el más obeso del mundo.
El sonorense se sometió a un procedimiento de corte duodenal para lograr cambiar su calidad de vida en octubre pasado.
La noticia rebasó fronteras y medios nacionales e internacionales siguieron el caso: Logró bajar 194 kilos y comprar ropa en una tienda talla 6x de la 13 que llegó a necesitar.
Perseguía sus anhelos
Moreno Sepúlveda tenía muchos sueños, el primero lograr bajar de peso, procrear y formar una familia y el segundo ayudar.
Por medio de una fundación planeaba apoyar a los miles de casos con obesidad de México y de su Estado, para que salieran del encierro en el que se encuentran en su propio cuerpo, tal como manifestó sentirse desde hace años con sus 444 kilos de peso.
Pese a que familiares no han informado si serán ellos quienes seguirán la lucha que el hermano, hijo, tío y sobrino emprendió, quienes se mantuvieron cerca de él ya planean culminar los proyectos, que quedaron hasta el momento en sólo deseos y palabras.
Aunque el cajemense sabía los riesgos que le podría traer los procedimientos para bajar de peso no tuvo miedo y decidió arriesgarse y nunca imaginó que serían los años con descontrol en su alimentación los que lo llevarían a dejar la mitad del camino sin recorrer.
Descanse en paz.