Por: Luz del Carmen Paredes
La agricultura orgánica, por sí sola, no es la solución, para acabar con la contaminación del Valle del Yaqui, se tiene que partir de una verdadera regulación a la industria química, porque, definitivamente, cultivos como trigo y maíz demandan la aplicación de estos productos, pero no de manera indiscriminada, como se viene haciendo, con las consecuencias mortales, por el índice de cáncer en la región, subrayó Sanjaya Rajaram.
El científico mexicano nacido en India, ganador del Premio Alimentario Mundial en el 2014, apuntó que se tiene que combinar el modelo de agricultura orgánica, con el uso de agroquímicos que requiere la planta, porque no se puede dar marcha atrás a los avances que se han tenido con la llamada Revolución Verde, que nace en el Valle del Yaqui, y que ha permitido acabar con la hambruna en muchos países del mundo.
Pero bien regulado, por lo que se tienen que contratar agrónomos bien preparados. “Los insectos y enfermedades no se van acabar, es igual con el humano”, refirió.
Puntualizó que con la agricultura orgánica no se va lograr suficiente alimento para sostener tres mil millones de habitantes, pues “hay cultivos, como verduras y algunos frutales, pero no con el trigo y el maíz, ya que la planta demanda el nitrógeno para crecer”.
Definitivamente se tiene que combinar el uso de químicos con el material orgánico debidamente probado, sostuvo.