Insiste cajemense en apoderarse de par de lotes en Nuevo Guaymas

Luego de varios intentos de apoderarse de un par de lotes del Sector Ranchitos Campestres de San Carlos –incluso mediante invasiones utilizando pandilla de malvivientes que mataron un par de caballos con los que se brindaban equinoterapias a niños con necesidades especiales—y, no obstante de pesar en su contra orden de aprehensión y exigencia de pago de gastos y costas de tres juicios enderezados por ella y perdidos, la obregonense María Ernestina Rivas Fernández insiste en tomar lo ajeno.
Así lo señaló Lizeth Guadalupe Rodríguez, directora de “Equinoterapias San Carlos”, quien a nombre de su hija Sahad Cahed Salas Rodríguez –propietaria de uno de los terrenos– demandó por despojo y, a resultas de la causa penal 12/2015, la Jueza Primera de Primera Instancia, Santa Adelina Flores Montoya, dictó auto de formal prisión contra Diana y Linda Ibarra Rivas, hijas de María Ernestina y quienes habían comandado una de tantas invasiones en aquellos predios.
También por la vía civil (expediente 779/2011 intentó apoderarse de un segundo lote y demandó a José Luis Llanes García.
Sin embargo, en sus afanes presentó documentos falsificados, sellos apócrifos de un notario público cajemense –supuestamente pasó por la fe en 1988 una compraventa, con sellos que de acuerdo a la Ley Número 92 de Notarías, se empezaron a utilizar en 1996– fallecido hace varios años; y aquel contrato, lo signó aparentemente un matrimonio de norteamericanos impedidos para vender un bien sin la existencia de previo fideicomiso.
Ante el cúmulo de ilegalidades en las que María Ernestina Rivas incurrió ante el tribunal, el Juez Segundo de Primera Instancia de lo Civil le “dio palo” a su demanda y la condenó al pago de gasto y costas a favor del demandado Llanes García.
El 27 de mayo del año pasado también perdió el juicio ordinario civil 226/2013, que puso en contra de la menor Sahad Cahed Salas Rodríguez; tampoco paga aún los gastos y costas de ese juicio y fue requerida penalmente.
Como oportunamente lo informó este medio, una de las invasiones ocurrió la noche del 31 de agosto del 2011, cuando acompañados de una pandilla de “cholos”, los obregonenses Diana, Chelis y Linda Ibarra Rivas invadieron predio del Sector Campestre de San Carlos, atrás del rebombeo de la CEA, donde exitosamente operaban –varios niños allí encontraron la salud y fueron dados de alta de sus problemas sicomotrices, luego de terapias con caballos—Equinoterapias San Carlos.
Días antes de ese evento, un juzgado dio “palo” a la madre de los invasores, Ernestina Rivas Fernández, quien con documentos apócrifos y falsos sellos notariales pretendió apoderarse de lote vecino.
El terreno en cuestión está a nombre de la menor Sahad Caed Salas Rodríguez, hija de la subdirectora de Equinoterapias San Carlos, señora Lizeth Guadalupe Rodríguez Plascencia quien, acompañada de numerosos padres de familia, presentó formal denuncia penal y/o querella ante el agente segundo del Ministerio del Fuero Común.
Ante el representante social y pasado por la fe del Notario Público número 41, licenciado José Francisco Flores Gascón, las hermanas Diana y Linda Ibarra –escoltadas en sus tropelías por un grupo de cholos cajemenses que azuzaron contra los paterfamilias de las equinoterapias–, reconocieron ausencia de títulos de propiedad del terreno que ilegalmente ocuparon.
Cabe precisar que en una primera incursión, los citados hermanos balearon a un hermoso caballo de raza azteca; “Sebastián” murió días después. En segunda ocasión, la víctima fue una yegua cuarto de milla, “Patty”, muy querida por los niños que allí recibían especializada atención. El noble animalito sucumbió a golpes internos y al estrés, según especialistas.
A resultas de las sucesivas incursiones nocturnas, las terapias con caballos hubieron de cambiar varias veces de sede y, los perpetradores aún insisten en denostar a los propietarios de aquellos bienes y recientemente les difamaron vía un medio obregonense.
Ello, a pesar de que dos de sus trabajadores –Mateo Orta Ortiz Araiza y Miguel Obed Bobadilla Benítez– a fueron formalmente presos por la invasión del predio titulado a nombre de la niña Sahad Cahed Salas quien, además, ha sido objeto de severas amenazas.