Un Arca de Noé vegetal en una cámara acorazada | Medio Ambiente – El Mundo
En los das de sol, el techo ondulado del Banco de semillas del Milenio (Millenium Seed Bank) es un lejano reflejo para los pasajeros que aterrizan en el aeropuerto de Gatwick. All, en ese edificio cristalino y futurista, a tiro de piedra de Londres y emboscado en las colinas de Sussex, se concentra el mayor esfuerzo para preservar la biodiversidad vegetal del planeta: hasta 2.500 millones de semillas de plantas silvestres, conservadas a 20 grados bajo cero y protegidas en una cmara acorazada resistente a inundaciones, explosiones y radiaciones.
«Se puede decir que somos algo as como el Arca de No vegetal, aunque a diferencia de los animales no tenemos a las semillas por parejas sino que preservamos una buena cantidad y nos aseguramos de que sean viables y puedan germinar», advierte Elinor Breman, responsable cientfica del Millenium Seed Bank, distinguido con el Premio Mundial a la Conservacin de la Biodiversidad de la Fundacin BBVA que ser entregado este martes.
«Cuando hablamos de la sexta extincin masiva, todo el foco se pone en los animales», recalca Brenan. «La triste realidad es que el 40% de las especies de plantas estn amenazadas, pero eso es algo que no solemos ver en los titulares. Somos capaces de conectar emocionalmente con los animales, pero al mismo tiempo vivimos en una especie de «ceguera hacia las plantas». Seguimos sin reconocer el papel esencial que juegan en nuestras vidas. Las plantas nos proporcionan oxgeno, alimento, medicina y refugio. Todo lo que hagamos por protegerlas es poco».
Elinor Breman (Londres, 1975) est muy agradecida por el reconocimiento de la Fundacin BBVA a esa labor semioculta de los ms de 80 investigadores (y 2.000 respartidos por el mundo) que comparten con ella esta aventura en el incomparable entorno del Real Jardn Botnico de Kew en Wakehurst. «Nuestra labor aqu consiste en dar opciones de futuro a las plantas», recalca la cientfica britnica, que embarc en el «Arca de No» de las semillas en el 2013, tras su paso por el Laboratorio de Ecologa a Largo Plazo de la Universidad de Oxford.
El Millenimum Seed Bank (MSB) cumpli 20 aos en 2020 y se adelant incluso a la apertura el Banco Global de Semillas de Svalbard en Noruega, consagrado a preservar la diversidad mundial de los cultivos. «Aqu nos dedicamos a las semillas de las plantas silvestres, sa es la principal diferencia», explica Elinor Breman. «La clave de nuestro trabajo es tambin la colaboracin con ms de 260 organizaciones y 190 pases. Fomentamos la existencia de bancos de semillas locales, y nosotros nos quedamos con las ‘copias de seguridad'».
El 16% de especies en sus neveras
Ms de 40.000 especies, el equivalente al 16% de las plantas conocidas del mundo, estn «preservadas» en las cmaras frigorficas a partir de sus semillas. Las reas ms vulnerables al cambio climtico, las parientes silvestres de los cultivos tradicionales o las especies endmicas y amenazadas tienen prioridad.
En 2005, por ejemplo, un corrimiento de tierras llev a la extincin en su habitat de la Abutilon Pitcairnense, una especie endmica de la isla de Pitcairn en Suramrica. Las «semillas de seguridad» que se guardaban en el MSB permitieron salvar de la extincin a la planta. Algo parecido pudo haber pasado tras la desaparicin de la Nymphaea thermarum, el nenfar ms pequeo del mundo, en su habitat natural en Ruanda (aunque esta ocasin el botnico gijons Carlos Magdalena haba logrado ya propagar la planta en los invernaderos tropicales del Kew).
«El banco de semillas es como un seguro de vida para las plantas, incluso si se extinguen en su lugar de origen», explica Elinor Breman, que recalca cmo aqu se conservan en estado «embrionario» hasta 24 especies de la isla de La Palma. Entre ellas, un arbusto endmico y perenne (Cheirolophus junonianus) que figura en la «lista roja» de especies amenazadas, con menos de 2.000 ejemplares.
«Por las noticias que tenemos, crece en una zona que no ha sido afectada por la erupcin del volcn. Pero si algo as hubiera pasado, aqu guardamos las semillas para asegurarnos de que no llegue a exintinguirse y para propiciar su reintroduccin llegado el caso, como hemos hecho en Australia con varias especies afectadas por los incendios del 2019. La restauracin de los hbitats es otro de nuestros cometidos, junto a la adaptacin de la agricultura al cambio climtico».
Una variedad de ajo silvestre que solo se encuentra en el Pirineo espaol, el Allium pyrenaicum, es otro de los ejemplos que le gusta citar a Elinor Breman: «Los Pirineos son el lugar de mayor biodiversidad de plantas de Europa y de all nos han llegado muchas semillas de especies autctonas. Como el resto de las zonas montaosas, es tambin una de las que est sufriendo el impacto del cambio climtico, al igual que las zonas costeras».
En los acantilados de nuestras costas e incluso en los arcenes de nuestras carreteras crece la pariente silvestre de la zanahoria, Daucus carota, reconocible por su umbela de flores blancas que se despliega en un tallo de hasta 10 centmetros, bajo el cual se oculta la raz napiforme y comestible. «Como otras variedades salvajes, ha sabido adaptarse a condiciones muy diversas y a partir de ella se pueden lograr quizs variedades ms resistentes. Avanzamos hacia un mundo de 9.000 millones de habitantes y va a ser necesaria mucha investigacin de agricultura adaptada al cambio climtico para poder alimentar a la poblacin».
El puente invisible entre los cultivos tradicionales y sus parientes «silvestres» es precisamente el plato fuerte de la investigadora aragonesa Elena Castillo-Lorenzo, que ejerce de gua en nuestra visita al Millenium Seed Bank y recalca los lazos de la institucin con Espaa. Los jardines botnicos de Canarias, Gijn y Valencia son miembros activos de la red en la que tambin participa el INIA (Instituto Nacional de Investigacin y Tecnologa Agrararia y Alimentaria).
Elena nos lleva de entrada a la habitacin de secado, con el anuncio de la reciente llegada de semillas Kazajistn y Suiza, codendose con remesas de Georgia, Bostwana, Zambia, Mxico y Repblica Dominicana: «Con la pandemia se ha complicado todo por los papeles fitosanitarios, pero antes nos llegaban 500 semillas casi a diario, de una gran variedad como puedes ver. Aqu se dejan las semillas durante cuatro semanas, a una temperatura de 15 grados y con un 15% de humedad relativa, para que puedan entrar en proceso de latencia o dormancia».
De ah pasan al departamento de limpieza, donde se separan del fruto o de la hojarasca con la que a veces llegan, o se criban incluso con redecillas como en el caso de las orqudeas, que tienen posiblemente las semillas ms pequeas del mundo. El siguiente paso es la observacin por rayos X, para descartar las que llegan vacas o infectadas y guardar solo las «viables».
Luego bajan al departamento de clasificacin, dentro ya de la cmara acorazada en el stano, y all se identifican y reciben un cdigo. «Esto es como la biblioteca de las semillas, solo que a veinte grados bajo cero», explica Elena Castillo-Lorenzo, antes de abrir una de las cmaras frigorficas donde la tinta del bolgrafo se queda instantneamente congelada.
Las semillas, ordenadas en botes de cristal o selladas hermticamente en recipientes laminados, parecen aqu tesoros encapsulados en una nave espacial. Vestidos casi como astronautas con sus monos trmicos para el fro, los investigadores realizan incursiones peridicas para comprobar los indicadores o renovar las colecciones (que pueden resistir decenas de aos).
«En el banco de Svalvard, en Noruega, las semillas se conservan en cajas negras, pero aqu hacemos un seguimiento constante para comprobar que siguen siendo viables y dedicamos una parte importante a la investigacin», explica Elerna, antes de subirnos al laboratorio donde se germinan en una solucin de agar o de mostrarnos el invernadero donde se experimenta con algunas especies.
Crioperservacin
Llegados a este punto, Elena nos introduce en el intrincado mundo de las semillas recalcitrantes, que no sobreviven a las condiciones de secado y almacenaje a 20 bajo cero y que estn pidiendo a gritos otros mtodos no convencionales. El Millenium Seed Bank cuenta con una amplio departamento de «criopreservacin» o conservacin de semillas en nitrgeno lquido a temperaturas de hasta 190 grados bajo cero.
Elinor Breman nos remite aqu a otro investigador espaol, Daniel Ballesteros, de la Universidad de Valencia, que trabaja con el equipo de biologa comparativa del Kew y est embarcado en un proyecto para «criopreservar» las semillas recalcitrantes de los bosques europeos (robles, carrascas, coscojas) que hasta ahora no cuentan con «copias de seguridad» en el «Arca de No» vegetal.
«La semilla es la promesa de vida contenida en un pequeo envoltorio», advierte Elinor Breman, con el contrapunto de la fronda otoal de Wakehurst. «Me habra gustado ver un mayor protagonismo al papel de las plantas en la Cumbre del Clima de Glasgow (COP26), pero pronto tendremos la COP15 de biodiversidad y tenemos que aprovechar la oportunidad para transmitir ese mensaje… Igual que un pintor necesita todos los colores en su paleta, la naturaleza se nutre de la variedad de la vida. Y la mejor manera de garantizarla es preservando las semillas para futuras generaciones».
Investigando los «parientes silvestres» de los cultivos
Elena Castillo-Lorenzo (Teruel, 1987) tiene un cometido muy especial como investigadora en el departamento de Conservacin de Semillas del Millenium Seed Bank: el estudio de los «parientes silvestres» de los cultivos tradicionales. «Son especies adaptadas muchas veces a factores ambientales como las sequas o las olas de calor, o resistentes a la plagas, que nos pueden ser muy tiles ante el cambio climtico», sostiene la ingeniera tcnica agrcola espaola, que lleva trabajando en el Real Jardn Botnico de Kew en Wakehurst desde el 2013.
La pasin por las plantas le viene de nia, y estar trabajando en el mayor banco de semillas de especies silvetres es para ella la culminacin de un sueo. Hasta all lleg con un master en Mejora Gentica Vegetal de la Universidad Politcnica de Valencia y tras su paso por el COMAV (Instituto Universitario de Conservacin y Mejora de la Agrodivesidad Valenciana). Su doctorado en Ciencia de las Plantas y del Medio Ambiente lo complet entre el Kew y la Universidad de Warwick, «estudiando la biologa y la ecologa de las semillas de parientes silvestres de col, cebada y girasol».
«Tambin me interesan mucho los cultivos minoritarios que ahora se consideran obsoletos o que no son competitivos, pero que podran tener caractersticas de inters para la mejora de los cultivos tradicionales», recalca Elena Castillo-Lorenzo, que recuerda cmo la quinoa era prcticamente desconocida fuera de Amrica del Sur y en pocos aos ha logrado una implantacin en todo el mundo.
«La zanahoria morada o algunas variedades de tomate que estn recuperando son otros ejemplos de alimentos que pueden encontrar una viabilidad comercial», advierte la investigadora, que ha estudiado tambin a los «parientes silvestres» de las berenjenas, los girasoles e incluso el caf, siempre buscando en ellos las claves que puedan ser tiles para cultivos tradicionales.
A Elena Castillo-Lorenzo le gusta recalcar la importancia de todo el tejido vegetal en los ecosistemas, de la planta ms pequea a los rboles ms altos. Durante un tiempo trabaj de hecho en investigacin con semillas de palmeras del Caribe y fue coordinaora de proyectos de conservacin e investigacin con semilla de rboles tiles nativos de Mxico y de Repblica Dominicana.
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