En San Carlos temen la llegada de nuevos proyectos mineros – El Colombiano

Hay preocupación entre la mayoría de habitantes de San Carlos ante la posibilidad de que en un futuro cercano se desarrolle megaminería en su municipio, tal como pasaría en su vecino San Roque.

El temor en este pueblo, reconocido principalmente por su riqueza hídrica y biodiversa, comenzó a rondar desde el pasado 23 de noviembre cuando allí se pensaba realizar una audiencia pública programada por la Secretaría de Minas de Antioquia en la que la comunidad escucharía a las empresas interesadas en realizar minería en el territorio. El encuentro se suspendió ante el rechazo ciudadano.

Esa suspensión no calmó los ánimos, porque los sancarlitanos temen que la audiencia —requisito esencial para lograr permisos mineros— se haga en otro momento y los coja descuidados.

En un medio local, Mary Luz Quintero, alcaldesa de San Carlos, manifestó que desde 2005 se han solicitado 35 títulos mineros en este territorio, los mismos que en 16 años no prosperaron. Sin embargo, todo cambió con la firma de un acta de concertación en julio de 2019 entre la saliente alcaldesa Luz Marín y la Secretaría de Minas, en la que se declaró que el 91,8% del territorio de San Carlos era área susceptible de vocación minera sin perjuicio de otras actividades productivas.

Para Katherine Arias, miembro del colectivo ecologista Econciencia Colectiva, así como de la Mesa de Víctimas y del Consejo Territorial de Paz de San Carlos, su población rechaza las intenciones mineras pues su territorio siempre ha tenido vocación campesina, agricultora y ecoturística.

Según Arias —con la construcción de tres hidroeléctricas— San Carlos ya cumplió su cuota ambiental en materia de infraestructura. “Además es muy contradictorio lo que hace la Gobernación, que por un lado habla de impulsar temas sostenibles en Antioquia, como hizo en Bioexpo, y por el otro, acompaña propuestas mineras que hacen daños ambientales en los territorios”, agregó.

Audiencia no significa permiso

El secretario de Minas de Antioquia, Jorge Jaramillo, aclaró que hacer una audiencia pública solo sirve para socializar los prospectos de exploración minera y que su realización no significa la autorización inmediata de la misma. De hecho, según estadísticas manejadas por los expertos en el tema y que él citó, de cada 150 prospectos mineros, 15 obtienen autorización como proyectos de exploración y de estos solo uno se autoriza para explotación minera.

El secretario también dijo que de las nueve empresas que siguen interesadas en hacer minería en San Carlos (una de ellas es Isagén), siete solicitan extracción de materiales de construcción y minerales industriales y dos de ellas, extracción de metales; y sus labores se realizarían en el norte de San Carlos en los límites con San Rafael, San Roque y Caracolí, y dos de ellas se encuentran dentro del municipio. Jaramillo también aclaró que si bien el 91% de San Carlos sería apto para proyectos mineros, de darse estos, solo afectarían 4.790 de las 73.090 hectáreas que componen el territorio, es decir, cerca del 6%.

El funcionario recordó que no es la Secretaría de Minas quien autoriza actividades mineras sino la Ley 085 de 2001.

Según el secretario, no hay una contradicción en que la Gobernación promueva proyectos sostenibles a la vez que impulsa la minería, pues para él ambos temas pueden coexistir, mas teniendo en cuenta que para los proyectos mineros de San Carlos y de todo el departamento se mantendrá una exhaustiva vigilancia al cumplimiento de las normas ambientales, tal como según Jaramillo pasa en la cuenca de Río Claro, zona turística de Antioquia donde también se extrae la caliza usada en el cemento que surte a Bogotá y Medellín y donde, según él, la empresa explotadora hace una compensación ambiental mayor a la establecida.

“Una de las cosas que nos piden es la reactivación económica, y resulta que esta se halla en las actividades mineras. Creo que lo más rentable para un territorio es tener actividades de extracción legales. Por ello, la Gobernación tiene una propuesta de crecimiento económico verde, y en ellas hay propuestas de minería ecológica con alto valor agregado en lo social y ambiental”, agregó.

El futuro de la minería

Aunque no definió una fecha, Jaramillo confirmó que la audiencia pública sigue suspendida. Lo que sí precisó es que continuarán haciendo pedagogía sobre las bondades y los controles que tendrían los proyectos mineros en San Carlos si estos llegasen a autorizarse, pues para la entidad no se pueden detener las intenciones mineras en el territorio, ya que ello equivaldría a renunciar a la legalidad de la actividad.

“Cuando las comunidades nos dejan explicarles cómo se ejecutarán los proyectos, y compartir que la autoridad minera propende por la legalidad, los estrictos controles y los grandes beneficios, la gente antes pedirá la intervención minera en los territorios. Por eso, queremos que San Carlos tenga la información y se entere de nuestra propuesta de valor”, dijo.

Sin embargo, gran parte de la comunidad de San Carlos y hasta la administración municipal por ahora no desean saber de minería en la zona, así lo señaló el comerciante Daniel Orrego: “La gente quiere una cancelación total de este proceso. Estamos muy preocupados porque como comerciantes hemos hecho inversiones en adecuar el municipio para propuestas agroturísticas, de hotelería y procesos de reforestación. La vida de San Carlos gira alrededor del agua, no de la minería”.

Panorama minero en Oriente

San Carlos cuenta con 17 títulos mineros inscritos, 8 de los cuales se desarrollan dentro del municipio y el resto son compartidos con pueblos vecinos como Caracolí, Granada, Guatapé, Puerto Nare, San Luis, San Rafael y San Roque. De los 17 títulos, cinco son de materiales de construcción, cuatro de minerales metálicos, seis son de roca o piedra caliza y 2 para todos los concesibles ya que se encuentran en etapa de exploración minera.}

A hoy, en los vecinos de San Carlos hay 123 solicitudes mineras para exploración (que generalmente dura entre 3 a 11 años y según la Secretaría de Minas son tareas con bajo impacto ambiental). Esto no significa que a futuro vaya a haber 123 proyectos mineros explotando los recursos, pues primero deben surtirse exigentes trámites ambientales antes de siquiera otorgar la licencia