Investigan a seis funcionarios por no haber valorado los riesgos de una industria que …
BarcelonaEl incendio de la industria Ditecsa en 2019 causó un «desastre ecológico» en el Besòs, en palabras de la Fiscalía, que ya hace tiempo que se querelló contra los responsables de la empresa de disolventes para provocar un derramamiento incontrolado de residuos en el río con unos efectos nefastos para el medio ambiente. Ahora la Fiscalía ha dado un paso más y también ha presentado una querella contra seis funcionarios de la dirección de Calidad Ambiental de la Generalitat por no haber valorado adecuadamente los riesgos del aumento de producción de la empresa. El juzgado de instrucción 21 de Barcelona ya ha abierto una investigación sobre el caso.
La Fiscalía acusa a los técnicos de «promover la aprobación» de todos los aumentos de consumo que pedía la empresa para incrementar «de manera significativa» la producción de disolventes, sin valorar si se sobrepasaban los límites establecidos por la ley. De hecho, la empresa tramitaba estas modificaciones como si se trataran de pequeños cambios a pesar de que por los volúmenes que solicitaba de agua o de energía tendría que haber utilizado otra fórmula legal. A pesar de todo, los seis funcionarios autorizaron las modificaciones.
De este modo, según la querella, avanzada por El Periódico y Efe, la industria pudo aumentar de manera desmesurada la producción de disolventes, hasta el punto de tratar 8.650 toneladas de disolvente cada año, a pesar del peligro que podía suponer para la salud de los vecinos de la zona y el ecosistema. Una «clara muestra» de este riesgo –dice el fiscal de Medio ambiente, Antoni Pelegrín– es el vertido que se generó en el Besòs a raíz del incendio de la planta de Montornès del Vallès. El fuego obligó a confinar a la población durante unas horas, pero, sobre todo, provocó un vertido de miles de toneladas de residuos durante días en el río que hizo «inviable» la supervivencia de toda la flora y fauna que había en aquel momento.
La Generalitat abrió dos expedientes sancionadores a Ditecsa en 2018 y 2019 por incumplimientos de la normativa ambiental en materia de residuos por un importe total de 58.000 euros. La Agencia Catalana de Residuos también había detectado en 2017 que la empresa almacenaba más materiales de los permitidos y que no documentaba suficientemente bien el tratamiento de residuos. A pesar de todo, la Generalitat consideró que ninguno de los incumplimientos suponía un riesgo para el medio ambiente.
Dos investigaciones en paralelo
La nueva causa contra el control de la Generalitat en la empresa se suma a la que ya instruye desde hace años un juez de Granollers contra los directivos de Ditecsa por el incendio y el vertido de residuos. En este caso, la Fiscalía considera que los empresarios gestionaban «incorrectamente» los residuos peligrosos, de forma que las consecuencias del incendio fueron todavía peores.
Según el fiscal, los directivos de Ditecsa eran conscientes de que estaban aumentando la producción «incorrectamente y sin respetar la normativa de gestión de residuos peligrosos». Tampoco daban a los trabajadores suficiente formación para manipular este tipo de productos.
Por eso el 11 de diciembre de 2019, cuando un trabajador del turno por la noche hacía su tarea habitual de mezclar disolventes o residuos en un bidón de 200 litros, no conocía qué sustancias se mezclaban. Dentro del bidón se inició un proceso de reacción exotérmica y, cuando estaba al lado de otros bidones de 200 litros a punto para ir al reactor de destilación, empezó a sacar humo. Este fue el inicio del incendio, que acabó con uno de los peores episodios de contaminación en Catalunya de la historia reciente.
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