Diez consejeros, Transparencia para el PP y Fomento y Medio Ambiente parcelados
El próximo Gobierno conformado por PP y Vox en Castilla y León contará con diez consejerías, como el anterior Ejecutivo de coalición con Ciudadanos, pero integrará el departamento de Transparencia —que ejercía el vicepresidente y anterior socio de Gobierno con Ciudadanos, Francisco Igea— en la Consejería de Presidencia, que seguirá gestionando el Partido Popular.
Además y según avanzó ayer Mañueco en su discurso de investidura como presidente de la Junta de Castilla y León, otra de las novedades en el diseño del Gobierno de coalición con Vox es que se dividirá en dos la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, que también estaba en manos del PP, dirigida por el leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones. Por un lado habrá una Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio y por otro una Consejería de Movilidad y Transformación Digital.
Un vicepresidente sin cartera
Vox, según el pacto, asumirá la vicepresidencia, pero sin cartera, y gestionará tres consejerías: Cultura a cargo de Gonzalo Santonja, Industria y Empleo dirigida por Mariano Veganzones, y Agricultura, gestionada por Gerardo Dueñas. Las dos primeras estuvieron en manos de Ciudadanos y la tercera pasa de estar gestionada por el PP a ser dirigida por Vox desde la próxima semana.
Fernández Mañueco, que no desveló los nombres de sus consejerías ni de sus consejeros —se conocerán el mismo día de la toma de posesión, anunciada ya para el martes 19 de abril— ratificó que se tratará de un gobierno «fuerte y solvente» e integrado por «personas experimentadas» y que, a pesar de su composición plural, tendrá «voz única».
Advertencia a Vox
Mañueco no desvela el nombre de sus consejeros y avisa de que sólo habrá una voz
«Que trabaje como una piña al servicio de esta tierra», pidióen su breve referencia a su futuro nuevo equipo de Gobierno, «con las ideas claras y sin complejos», que sepa «dónde estamos y dónde queremos llegar» y «asuma con decisión» el futuro y los retos que hay que afrontar.
«Es un gobierno que pretendo dirigir ejerciendo una serie de principios que han inspirado toda mi actuación pública y a los que, por supuesto, voy a seguir siendo fiel», lanzó como advertencia. «Ante todo, está la ilusión de trabajar sin descanso por mi tierra. De aprender de mis aciertos y errores para seguir construyendo este gran proyecto de vida común que es Castilla y León. Es lo primero que está por encima de todo y por encima de todos. Castilla y León es la pasión que me alienta cada día. La que hace que dé lo mejor de mí y nos exige lo mejor a todos», concluyó ya en clave personal.