Subasta Sotheby’s dos piezas de origen maya y olmeca en Nueva York
Reyes Martínez Torrijos
Periódico La Jornada
Jueves 26 de mayo de 2022, p. 4
La casa de subastas Sotheby’s realizó hace dos días la puja Colección Amy y Elliot Lawrence, de 94 lotes provenientes de antiguas culturas del mundo, tres de ellos vinculados con México.
En la sede neoyorquina de la firma británica, la venta de dos piezas de origen maya y olmeca alcanzó un precio conjunto de 17 mil 514 dólares (casi 350 mil pesos).
El martes pasado, Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal, manifestó en su cuenta de Twitter: “Nos oponemos rotundamente a la venta de piezas arqueológicas que pretende realizar Sotheby’s en Nueva York. Lo decimos fuerte y claro: #MiPatrimonioNoSeVende”.
En el catálogo de la subastadora, de las tres piezas mayas y olmeca no se menciona su origen en México, nación que en los meses recientes ha dado la batalla contra la venta de su patrimonio cultural. En cambio, de otras sí se describe que provienen de Egipto, Grecia, Mar de Bering, Japón, Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea, Congo, Costa de Marfil, Ghana, Benín, Nigeria y Camerún.
La pieza relacionada a nuestro país con una recaudación mayor fue una escultura maya de un dignatario, por la que se obtuvieron 11 mil 970 dólares (poco más de 237 mil pesos).
▲ La escultura maya de un dignatario (en la imagen) se subastó en poco más de 237 mil pesos.Foto tomada de la página de Sothebys
Se trata de una figura de pie, en una postura orgullosa, con los brazos cruzados frente a él, este señor lleva los atributos propios de su rango: una elaborada diadema de filete, orejeras, collar y un largo taparrabos que conserva gran parte de su hermoso pigmento azul maya. Su nariz tiene el puente alto y arqueado, que era el ideal maya
, según se consigna em la página de la empresa.
Los especialistas para el rubro de arte de África, Oceanía y América en esta puja fueron Paul Lewis y Stacy Goodman. Las piezas fueron exhibidas del sábado al lunes pasados.
En el sitio web de la firma se relata que a partir de los años 50, Amy y Elliot Lawrence formaron una colección de escultura premoderna por excelencia, que incluía arte clásico africano, oceánico y de los indios americanos, así como antigüedades precolombinas, asiáticas y clásicas.