La CE pide aclaraciones a Neelie Kroes y Elite Taxi la dimisión de la presidenta de la CNMC por su relación con Uber
La Comisión Europea ha pedido a Neelie Kroes, su antigua vicepresidenta y excomisaria europea de Competencia y Agenda Digital, aclaraciones sobre su relación con Uber, tras publicarse en la prensa documentos que muestran cómo el gigante de la movilidad estadounidense trató de agasajar a políticos de todo el mundo para establecerse en el mercado, según ha comentado este lunes en rueda de prensa el portavoz comunitario Balazs Ujvari.
«La CE ha visto todos los artículos de prensa que se han publicado en las últimas 24 horas sobre este tema y estamos analizando las informaciones», ha destacado. «Lo que puedo anunciar por ahora es que la CE ha decidido enviar una carta» a la excomisaria holandesa para «aclarar los datos aparecidos en los medios». Balazs no ha detallado el contenido de la carta, porque con «un ejemplo de comunicación bilateral entre la CE y la exvicepresidenta» ni ha querido valorar si las prácticas denunciadas por la prensa son una violación del Código de Conducta que se aplica a los comisarios.
Desde la Comisión Europea han dejado claro que no quieren sacar «rápidamente conclusiones» y que primero recopilarán antes toda la información. En cualquier caso, ha señalado que «no hay que olvidar que, como está indicado en los tratados, los antiguos comisarios tienen ciertas obligaciones que tienen que respetar» y que, si es necesario, «evidentemente siempre hay un papel que puede jugar el Tribunal de Justicia» de la Unión, informa Efe.
Miles de archivos filtrados este fin de semana a través de varios medios, incluido El País, han expuesto cómo Uber cortejó a los principales políticos y cómo la empresa supuestamente recibió ayuda de líderes como Emmanuel Macron y la ex comisaria Kroes. Según los documentos recogidos por la prensa, Kroes estuvo en conversaciones para unirse a Uber antes de que terminara su mandato en la Comisión, y habría presionado en secreto a favor de la empresa, lo que supondría incumplir las normas éticas de la UE. En ese momento, Uber era la empresa tecnológica de más rápido crecimiento en el mundo y una de las más controvertidas, pues estaba inmersa en casos judiciales, denuncias de acoso sexual y escándalos de violación de datos.
En concreto, The Guardian asegura que Kroes ayudó a la plataforma a contactar con políticos relevantes en Países Bajos, incluido su primer ministro, Mark Rutte, y lo hizo de manera «confidencial» conscientes de que tal conducta podría contravenir las reglas comunitarias. También el periódico belga Le Soir ha indicado que Kroes quiso unirse al comité consultivo de Uber nada más dejar Bruselas, pero los servicios comunitarios le denegaron el permiso por la obligación de esperar 18 meses para evitar incompatibilidades.
Kroes ha negado haber tenido alguna vinculación formal o informal con Uber antes de mayo de 2016, cuando expiró el plazo de 18 meses para que los antiguos responsables del Ejecutivo comunitario trabajen en puestos del sector privado en el que pueden influir en los nuevos comisarios. La ex vicepresidenta de la CE, que ocupó un asiento en el Colegio de Comisarios durante una década, entre 2004 y 2014, bajo el mandato de José Manuel Durao Barroso como presidente de la institución, ha añadido que como comisaria de la UE interactuó con numerosas empresas de tecnología, «siempre impulsada por lo que creía que beneficiaría el interés público».
«Nuestra relación con Neelie Kroes es altamente confidencial. Su nombre no debería figurar nunca en un documento», indicó un destacado lobista de Uber en un correo electrónico de marzo de 2015, cuatro meses después de la salida de Kroes de la CE. Uber ha explicado que Kroes dejó su consejo asesor en 2018 y que desde entonces ha introducido nuevas pautas para «fortalecer la supervisión» de las prácticas de lobby en Europa.
Los archivos filtrados, con más de 124.000 registros, incluidos 83.000 correos electrónicos y otros 1.000 archivos relacionados con conversaciones que abarcan desde 2013 a 2017, han revelado cómo además de hacer lobby en las más altas esferas, Uber incumplió leyes para entrar en numerosos mercados. La compañía, dirigida en esos años por el polémico Travis Kalanick, ofrecía regalos y presionaba a primeros ministros, oligarcas y magnates de medios de comunicación, según los documentos filtrados.
Según lo publicado por The Guardian y otros medios, Uber fue tejiendo una red de influencia en cada país en donde quiso implantarse para, con regalos (como viajes o comidas en restaurantes) o sobornos, convencer a políticos y otros grupos de interés de ayudar a su negocio frente al taxi tradicional. Uno de los directivos de Uber admite en uno de los archivos filtrados que se comportaban como «piratas». Otra directiva se jactaba de que eran «jodidamente ilegales» y que había que «abrazar el caos» para impulsar su crecimiento. «La violencia garantiza el éxito», llegaron a decir sobre los enfrentamientos con el sector del taxi.
La multinacional estadounidense aseguró este fin de semana que «no hemos puesto ni pondremos excusas por los comportamientos pasados que claramente no son coherentes con nuestros valores actuales». Igualmente, ha aclarado que ninguno de los directivos de aquella época permanecen ya en la compañía, y ha pedido que se les juzgue por los últimos cinco años y lo que harán «de aquí en adelante».
Papel de la CNMC
En España, el coordinador de Élite Taxi, Tito Álvarez, ha pedido hoy la dimisión de la presidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), Cani Fernández, por su vinculación con Uber como abogada de la plataforma. El representante del sector el taxi ha asegurado que, según la documentación publicada, Uber veía a la CNMC como «el principal aliado en la Administración Pública española», y ha recordado que entonces Fernández era abogada de la plataforma.
«Esta señora tiene que dejar el cargo inmediatamente, esto es corrupción de alto nivel, en su máxima expresión», ha afirmado el coordinador de Élite Taxi, informa Europa Press. Para Álvarez, los documentos publicados «demuestran que Uber hace estrategias de organización criminal y mafiosa». Y ha añadido que el mismo ha estado «monitorizado» durante años, que ha sido víctima de amenazas que le han obligado a cambiarse de domicilio y que ha recibido denuncias que formaban parte de un «montaje».
Álvarez también ha reclamado que la Autoridad Catalana de la Competencia (ACCO) retire el expediente sancionador que abrió en enero a las dos asociaciones que lidera, Élite Taxi Barcelona y Taxi Project 2.0, por posible conducta anticompetitiva, que incluiría actos de boicot, prácticas agresivas y denigratorias, para que los taxistas del área metropolitana no se sumaran a Uber.
Aunque ha asegurado que no harán ningún paro, el coordinador de Élite Taxi ha avanzado que convocarán una protesta para esta semana en la ACCO o en la CNMC para reclamar la dimisión de Cani Fernández y el archivo del expediente sancionador.