Ganan $35,000 al capturar mil kilos de mantarrayas en Progreso – Diario de Yucatán
PROGRESO.— Toneladas de mantarrayas o balá son capturadas frente las playas de Chicxulub y el malecón de Progreso, donde recalan al huir de la marea roja.
La arribazón deja ganancias a los ribereños, pues el kilo se paga a $35.
Lanchas ribereñas, la mayoría con base en el muelle pesquero La Caleta, capturan mantarrayas a 100 y 300 metros de la orilla del mar, donde recalan al no poder avanzar a aguas profundas porque se lo impide la marea roja, donde no hay oxígeno.
Conocida popularmente como mantarrayas, los pescadores las llaman balá.
Los balá llegaron en abundancia, la arribazón fue inesperada y después de los grandes volúmenes de calamar, que esta semana comenzó a escasear, dijeron ayer los ribereños Eduardo López Coral y Jorge Cardozo Cervera.
Biólogos del Centro Regional de Investigación Acuícola y Pesquera (Criap) de Yucalpetén, del Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura (Inapesca), bajo la supervisión de su directora, doctora en Ciencias Alicia Virginia Poot Salazar, tomaron muestras de los balá para analizar si son tóxicos.
Pesca de mantarrayas, un respiro a la economía en Progreso
La arribazón de mantarrayas es un importante respiro para la economía de los ribereños, quienes suspendieron la pesca de pulpo porque no hay molusco cerca de la costa por la marea roja.
Al menos 20 lanchas ribereñas de La Caleta y otro tanto de ribereños del malecón y Chicxulub desde el lunes pasado pescan balá.
Según Cardozo Cervera, el kilo de mantarraya se paga a $35 y la captura es por medio del equipo de palangre. Las lanchas obtuvieron de 500 a 1,000 kilos, en dos o tres lances del palangre (hilos, cordeles y anzuelos) al mar.
Hay ribereños que en un solo lance capturaron una tonelada del balá y ganaron $35,000 en una jornada nocturna y matutina.
En cada lancha viajan dos o tres pescadores. Muchos, ante la buena captura de balá, dejaron la pesca de sardina y calamar, y cambiaron las redes por el palangre.
Previenen picaduras de mantarraya
Para prevenir la picadura de la mantarraya, usan guantes y ganchos fuertes para subirlas a las lanchas.
Los balá de cinco, 10 y hasta 50 kilos de peso fueron capturados frente la playa del malecón y Chicxulub.
Pescadores que se encontraban en la playa comentaron que vieron cómo los lancheros luchaban con un balá grande, que calcularon pesaba como 40 kilos, para subirlo a la lancha.
Indicaron que la pesca de balá durará unos tres días más, luego escaseará como ocurrió con el calamar, que aunque hay poco su precio se desplomó a $50 el kilo y pocas personas lo compran.