Los ‘hackers’ hacen su agosto: los robos de criptomonedas han aumentado un 60% en lo que va de 2022
El ‘criptoinvierno’ no afecta a los hackers criptográficos. O sí. Pero para bien. Entre enero y julio de 2022, según Chainalysis, los robos de criptomonedas han aumentado un 60%, para llegar hasta los 1.867,8 millones de euros (1.900 millones de dólares al cambio actual).
En un post publicado el pasado martes, 16 de agosto de 2022, afirman que es probable que esta tendencia al alza continúe.
De hecho, este mismo mes de agosto ya se han robado 188,75 millones de euros (192 millones de dólares) en un solo hackeo en Nomad. Y otros 196,61 millones de euros (200 millones de dólares) extraídos de 8.000 billeteras de Solana.
Los ‘hackers’ de criptomonedas se aprovechan de los protocolos DeFi
Desde Chainalysis aseveran que gran parte de los robos de criptomonedas perpetrados por estos hackers se hacen a través de los protocolos DeFi (finanzas descentralizadas).
Estos son programas que hacen posible transacciones criptográficas sin intermediarios, y que pueden resultar peligrosos para los usuarios más vulnerables, ya que se basan en un código fuente abierto susceptible de ser estudiado por los ladrones.
La firma de investigación agregó que los ataques cibernéticos han tenido, en muchos casos, su procedencia en Corea del Norte.
Es más, con datos de las autoridades estadounidenses, los hackers de este país asiático robaron al menos 983 millones de euros (1.000 millones de dólares) y lavaron dinero a través de Tornado Cash, un protocolo de privacidad que ha sido sancionado por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos.
Caen las estafas con criptomonedas
A diferencia de los hackeos, las estafas con criptomonedas han descendido de manera notable en lo que va de 2022.
También a tenor de la información proporcionada por Chainalysis, estas cayeron en un 65%, hasta los 1.572 millones de euros (1.600 millones de dólares).
Cómo funcionan los préstamos con criptomonedas y cuáles son sus principales riesgos
El decremento de las estafas, apuntan desde la firma de investigación, va a la par del desplome en el precio de bitcoin: «A nadie le gusta un mercado bajista de criptomonedas, pero el lado positivo es que la actividad ilícita ha caído junto con la actividad legítima», afirman.
En 2022 también ha aumentado la presión sobre los reguladores: la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos anunció que casi duplicaría el personal en su unidad de criptomonedas.