Minería: elevado uso de mercurio impacta en la salud de indígenas – Los Tiempos
Bolivia continúa siendo el blanco de críticas a nivel internacional por haberse convertido en el «centro neurálgico» de distribución de mercurio hacia otros países de la cuenca amazónica, alimentando así la minería ilegal del oro y la contaminación en la región.
Mientras esto ocurre, sus comunidades indígenas se enferman. Recientes investigaciones realizadas en el norte boliviano han encontrado —nuevamente— niveles de mercurio en indígenas por encima de lo tolerable de acuerdo a parámetros internacionales.
En un conversatorio realizado el jueves por el Foro de Latinoamérica Berlín (LAF, por sus siglas en alemán), se criticó el papel que juega Bolivia en los esfuerzos de otros Gobiernos por disminuir el uso de mercurio en la minería aurífera.
Pese a que, como la mayoría de los países, a excepción de Venezuela, Bolivia firmó el Convenio de Minamata para reducir el uso de mercurio, la realidad es muy distinta. Desde 2015 se ha convertido en uno de los principales importadores de mercurio en el mundo y, hoy en día, en distribuidor ilegal del producto tóxico a países como Brasil y Perú.
«Bolivia destaca de manera negativa por el rol que cumple en el comercio de mercurio. Está jugando un rol negativo en el mundo y de eso se habla en distintos foros internacionales», manifestó el director del Centro de Documentación e Información Bolivia (Cedib), Óscar Campanini.
Bolivia incumple acuerdo
Mientras que el resto de los países ha implementado medidas para controlar el uso de mercurio, Bolivia no hizo lo mismo, no cumple el Convenio de Minamata y «se ha convertido en el canal para lavar este producto», acotó Campanini en el mencionado conversatorio.
Bolivia importa más mercurio del que necesita para la extracción del oro y «esta inconsistencia ha dado pie a que el Estado Plurinacional sea señalado como uno de los puntos neurálgicos de contrabando de mercurio hacia los países de la cuenca amazónica», manifestó Juliana Ströbele-Gregor, de LAF Berlín.
«Es algo muy terrible ver que un Gobierno se hace casi partícipe de lo que pasa con el mercurio en el país», añadió.
Asimismo, el relator sobre Sustancias Tóxicas de Naciones Unidas, Marcos Orellana, recordó que envió cartas al Gobierno boliviano expresando su preocupación de que el país se haya convertido «en un centro de distribución de mercurio en la región, que fomenta la minería ilegal del oro».
Campanini lamentó que, pese a las observaciones y los reportes sobre lo que ocurre en Bolivia, el Gobierno priorice los beneficios al sector minero cooperativista. «El Estado tiene un rol negativo por no tomar acciones que en su propia normativa nacional e internacional se establece. Acá priman los intereses económicos y políticos», dijo.
En septiembre de este año, representantes del Gobierno boliviano manifestaron ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que el país respeta sus compromisos internacionales, aunque mencionaron que tiene dificultades para reducir el uso de mercurio considerando la tradición minera que se mantiene desde la época de la colonia.
En ese entonces, la embajadora ante la ONU en Ginebra, Maira Macdonal, resaltó que se promueve y se garantiza la conservación del medioambiente, así como los derechos de los pueblos indígenas.
Indígenas afectados
De acuerdo a dos estudios difundidos recientemente por el Cedib y la Central de Pueblos Indígenas de La Paz (Cpilap), pobladores de distintas comunidades en el norte boliviano presentan niveles de mercurio en sus cuerpos por encima del parámetro internacional, equivalente a 1 parte por millón (ppm).
El Cedib tomó muestras de cabello en 10 comunidades de la cuenca del río Madre de Dios y en cinco comunidades de la cuenca del río Beni. En todos los casos encontró niveles muy por encima de 1 ppm. En una comunidad del Madre de Dios se halló un caso con 114 ppm.
El estudio del Cpilap halló que cinco pueblos indígenas del norte de La Paz contienen niveles de mercurio por encima del margen internacional (1 ppm).
Asimismo, encontró contaminantes en los ríos como fluoruros, plomo, nitritos, bromo y cloro, los cuales provienen de la minería.
Orellana plantea modificar convenio
El Convenio de Minamata permite el uso de mercurio para la minería a pequeña escala. Sin embargo, muchas operaciones mineras que figuran como tales son en realidad actividades a gran escala. Por ello, el relator de las Naciones Unidas, Marcos Orellana, planteó nuevamente modificar el convenio para prohibir el mercurio en todo tipo de minería.