Las ventas de aceite de oliva cayeron un 17,3% en enero por el aumento de los precios en origen
El aceite sigue creando polémica. En enero de 2023 de un total de 45,68 millones de aceite que salieron del mercado y solo 20 millones eran de oliva. Solo este dato supone ya una caída de 17,33% con respecto al mismo periodo del año pasado, según los datos de la Asociación Nacional de Industriales Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac).
Solo durante el mes de enero, el total de la facturación de los aceites envasados del grupo Anierac cayó 4,16 millones de litro, un 8,35% menos. Según el director de la asociación, Primitivo Fernández, «el aumento de los precios en origen, los costes de producción en el olivar y una menor cosecha ha causado que los precios hayan aumentado. Hace solo un año el precio en origen del aceite de oliva era de 3,40 euros y ahora el precio más habitual es 5,40«.
Como ya adelantó este periódico, las cadenas de distribución y los envasadores culpaban a los agricultores por especular con el precio del aceite y esperar a sacarlo al mercado cuando alcance los 6 euros por litro. A cierre de año, los agricultores llegaron a sumar así 384.600 toneladas, mientras que la industria disponía únicamente de 242.300 toneladas.
Otros aceites
El aceite de orujo de oliva representa 1,15 millones de litros del total y el resto, 24,5 millones, fueron aceites refinados. En este último caso, durante la campaña 2022/2023, destacan las ventas del refinado de girasol que en enero alcanzaron los 18,27 millones de litros, un 9,62% menos respecto a enero del 2022.
Lejos de estas cifras, están las ventas del refinado de semillas, que con 5,86 millones de litros presentan una cantidad un 50% superior en este periodo del 2023. El resto corresponden a cantidades mucho menores de colza, soja, maíz, pepita de uva y cacahuete.