Operan restaurantes de Cuernavaca sin agua en sus baños; obliga SAPAC a violar la ley
Algunos restaurantes del Centro de Cuernavaca operan esta Semana Santa sin servicio de baños para sus clientes por falta de agua, a pesar de que es uno de los requisitos que cualquier negocio del sector restaurantero debe cumplir, según la Norma Oficial Mexicana (NOM) 251 sobre prácticas de higiene para el proceso de alimentos, bebidas o suplementos alimenticios.
No tienen agua porque el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), del gobierno de la ciudad, hace tiempo que dejó de tener capacidad para resolver los problemas con la red de distribución en el primer cuadro y, simplemente ¡no hay agua!, señalaron empresarios consultados recientemente sobre la problemática.
La mayoría de los establecimientos que demandan agua en cantidades importantes, la adquieren a través de pipas, con un sobrecosto con cargo a su presupuesto anual de operación, ha señalado en diferentes momentos la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Griselda Hurtado Calderón.
Pero no todos tienen condiciones para garantizarse el abasto del vital líquido, porque los inmuebles que los alojan no tienen cisternas, o porque se encuentran en las azoteas de los edificios, a manera de “terrazas”, y eso les dificulta aún más la maniobra, pero aun así continúan prestando el servicio de alimentos.
-¿Dónde queda el sanitario? – Le ofrecemos una disculpa, pero por el momento no contamos con ese servicio, porque no hay agua.
Fue el diálogo entre una clienta y un mesero de un establecimiento que se ubica en los altos de un edificio frente a la Catedral, es decir, en pleno Centro de Cuernavaca, el cual no contaba con agua ni para que los comensales se lavaran las manos.
En la misma zona, los baños públicos, fijaron un cartel en su fachada, sobre la suspensión del servicio por no contar con agua.
Aunque la situación es crítica y cuestionable porque, en el caso de los negocios de comida, violan incluso las normas de salud e higiene que deben acatar, pareciera que la situación empieza a “normalizarse”, con una administración municipal, cuyo representante, José Luis Urióstegui Salgado dio la espalda al problema respondiendo a los ciudadanos que “con manifestaciones no se va a resolver la falta del servicio”.
Existe una norma
La NOM 251 sobre Prácticas de Higiene para el proceso de alimentos, bebidas o suplementos alimenticios señala:
“Los baños deben contar con separaciones físicas completas, no tener comunicación directa ni ventilación hacia el área de producción o elaboración de comida y contar como mínimo con lo siguiente:
a) Agua potable, retrete, lavabo que podrá ser de accionamiento manual, jabón o detergente, papel higiénico y toallas desechables o secador de aire de accionamiento automático. El agua para el retrete podrá ser no potable;
b) Depósitos para basura con bolsa y tapadera oscilante o accionada por pedal;
c) Rótulos o ilustraciones en donde se promueva la higiene personal, haciendo hincapié en el lavado de manos después del uso de los sanitarios. i
ANTONIETA SÁNCHEZ / antonieta.sanchez@diariodemorelos.com