¿Qué son los exoplanetas? Estos son los más raros que ha descubierto la NASA
Si hay o no hay vida más allá de nuestro planeta, es una de las grandes preguntas que se hace la humanidad desde hace siglos. Pero lo cierto es que, desde que en 1995 se descubriera el primer exoplaneta alrededor de una estrella como nuestro Sol, hoy en día el estudio de estos es una de las áreas de la astronomía que más rápido crece.
Los exoplanetas, es decir, un planeta fuera de nuestro Sistema Solar, por lo que, en ocasiones, también se le denomina “planeta extrasolar”, es una de las cuestiones en las que más trabaja la NASA. Se ha confirmado la existencia de casi cuatro mil exoplanetas y todos ellos son muy distintos entre sí.
Según la Agencia Espacial Europea, ESA, «algunos son masivos, como Júpiter, pero giran alrededor de su estrella progenitora mucho más cerca de lo que Mercurio orbita el Sol. Otros son rocosos o helados, y muchos simplemente no tienen nada parecido en el Sistema Solar«.
Por otra parte, hay sistemas que albergan más de un planeta, planetas que orbitan dos estrellas a la vez, e incluso un puñado de planetas que podrían presentar las condiciones adecuadas para que su superficie tenga agua de forma estable, uno de los ingredientes necesarios para la vida tal y como la conocemos.
¿Cómo se descubren estos exoplanetas?
Hay varias formas para buscar y descubrir a los denominados planetas extrasolares. Una de ellas es la técnica de la estrella tambaleante: según este método, al existir ciertos planetas orbitando alrededor de una estrella, esta estrella queda descentrada de su órbita y por eso da la sensación de estar tambaleándose.Aunque mediante la observación de la estrella se pueden encontrar otros planetas, no deja de ser un método un tanto arbitrario ya que, según el tamaño del planeta, será más fácil o más difícil observar dicha oscilación.
Por ejemplo, ante exoplanetas del tamaño de Júpiter, es sencillo poder ver ese cierto movimiento de la estrella en la que orbita el planeta. Sin embargo, si se trata de exoplanetas de tamaño similar a la Tierra, será difícil poder apreciar el ‘bamboleo’ de la estrella.
El otro método, denominado de tránsito, consiste en la observación de un hecho empírico. Cuando un planeta pasa delante de su estrella, esto se llama tránsito. Cuando el planeta transita frente a la estrella, cubre un poco su luz. Eso significa que la estrella se verá un poco menos brillante cuando el planeta pase por delante de ella.
De esa forma, al poder observar cómo cambia el brillo de una estrella durante un tránsito, los astronautas pueden intuir el tamaño del planeta y la distancia a la que se mantiene de su estrella. Esto es fundamental en la búsqueda de vida en otros planetas ya que, a partir de esa distancia, es decir, lo que se conoce como zona habitable del planeta, se extrae mucha información relacionada con la temperatura del mismo o si podría contener agua líquida, un ingrediente esencial para que pueda desarrollarse la existencia de vida.
Algunos de los planetas descubiertos por la Kepler
En 2009, la NASA lanzó una nave espacial llamada Kepler para buscar exoplanetas. Kepler buscó planetas de varios tamaños y órbitas y estos planetas orbitaban alrededor de estrellas de distinto tamaño y temperatura. No obstante, pese a que la nave ha encontrado miles de exoplanetas, algunos de ellos siguen siendo misteriosos y enigmáticos tal y como se puede apreciar en la página web de la NASA, dedicada a la observación de exoplanetas descubiertos por la Kepler.
- Kepler 36B y 36C: Los extraños ‘gemelos’
El Kepler 36 se trata de un conjunto de dos exoplanetas muy distintos entre sí, que discurren a una distancia muy cercana orbitando sobre la misma estrella. Lo curioso es que, mientras que el 36B es un planeta con 1,5 veces la masa de la Tierra situado en una órbita con un «año» de 14 días. Por contra, Kepler-36c es un neptuno caliente con una masa de 8 veces la de la Tierra y un diámetro 3,7 veces superior al terrestre.
No solo se diferencian en su tamaño, si no que el hecho de que uno de ellos sea un planeta rocoso y el otro un gigante de hielo similar a Neptuno, hace que la combinación de ambos planetas y su respetiva posición del uno del otro, sea un peculiar caso de estudio. Así, mientras que en el 36B está sometido a enormes fuerzas de marea que muy probablemente causen episodios periódicos de vulcanismo, el Kepler 36C es un exoplaneta con un paraje y temperatura totalmente distinta.
Es por eso que, en algunas representaciones facilitadas por la NASA sobre cómo sería la conjunción de ambos planetas cada 97 días, la apariencia de ambos exoplanetas sea tan llamativa e increible.
- Kepler 16B: El planeta de ‘las dos Lunas’
Este exoplaneta fue el primero que fue descubierto orbitando alrededor de una estrella binaria: un sistema formado por una estrella enana naranja y una enana roja. Está ubicado a 200 años luz de distancia y tiene aproximadamente el tamaño de Saturno.La temperatura de la superficie del planeta estimada por los científicos de la NASA es de -73° a -101° grados celcius debido a que sus dos soles son más pequeños y menos intensos en comparación al nuestro.
Como dato curioso, el hecho de que este exoplaneta fuera descubierto por la Kepler cuando pasaba por delante de sus dos estrellas, hace que, irremediablemente, nos venga a la cabeza la escena del planeta Tatooine, de la saga de Star Wars, en la que se vislumbran dos soles al atardecer.
- Kepler 452B: el primo lejano de la Tierra
Pero sin duda, si hay un exoplaneta que nos hace pensar en la existencia de vida inteligente más allá de nuestro planeta, ese es el Kepler 452B. Descubierto el 23 de julio de 2015, este planeta que cuenta con unas condiciones de habitabilidad y un tamaño muy similar a la Tierra.
Orbitando alrededor de la estrella Kepler 452, se trata del primer cuerpo planetario que orbita dentro de la zona de habitabilidad de una estrella semejante al Sol. Es por eso por lo que a este exoplaneta se le denomina en la NASA como el primo de la Tierra.
No obstante, estos son solo algunos de los exoplanetas registrados por la nave Kepler y existen muchos otros con características muy dispares registrados por la NASA. Por eso, por si quieres seguir echando un vistazo a aquellos misteriosos cuerpos planetarios, puedes hacerlo a través de la página web de la Administración Nacional de Aeronáutica y Del Espacio Estadounidense.
Si hay o no hay vida más allá de nuestro planeta, es una de las grandes preguntas que se hace la humanidad desde hace siglos. Pero lo cierto es que, desde que en 1995 se descubriera el primer exoplaneta alrededor de una estrella como nuestro Sol, hoy en día el estudio de estos es una de las áreas de la astronomía que más rápido crece.