Meta prepara su propia versión de Twitter. Y ha decidido hacerlo aprovechando su músculo en Instagram
Twitter ve cómo se asoma un nuevo competidor en el horizonte, uno con el respaldo nada desdeñable de Meta. Que la compañía de Mark Zuckerberg trabaja en una red social con la que repescar a los usuarios desencantados con la deriva del pájaro azul no es exactamente una novedad. Ya lo confirmó en marzo la compañía, que reconoció a Platformer que exploraba una plataforma “descentralizada” de microblogging. Ahora podemos ir sin embargo más allá de las descripciones someras y conocer algunos detalles de la nueva aventura de Meta.
Incluso podemos echarle un vistazo.
Autónoma, descentralizada y con textos. He ahí las tres ideas básicas que deslizó Meta sobre su nuevo proyecto en marzo, después de que Money Control y Platformer adelantaran sus planes. Sin ahondar en detalles, calendarios ni cifras, la compañía se limitó a confirmar que estaba “explorando una red descentralizada e independiente para compartir textos». Casi tan interesante como la forma era sin embargo el fondo: la noticia se filtró en un momento especialmente delicado para Twitter, con el equipo de Elon Musk buscando formas de rentabilizar la empresa y después de que miles de sus usuarios decidiesen dar el salto a Mastodon.
¿Y qué sabemos ahora? Algún detalle más. TechCrunch y Lia Haberman, autora del boletín ICYM en Substack, han podido acceder a la información que Meta estaría compartiendo con algunos creadores. Y una de las primeras lecturas que dejan es que el proyecto parece avanzar rápido. Ambos deslizan que la nueva aplicación podría lanzarse este verano. Haberman incluso afina el tiro y apunta a finales de junio. Fechas aparte, lo realmente interesante son las pinceladas que dan sobre un proyecto que ya se conoce con los nombres en clave P92 o Barcelona.
Una aventura con la red de Instagram. La nueva plataforma puede ser independiente y centrar su estrategia en el texto —como avanzaba en marzo Meta— pero se apoyará en gran medida en Instagram, una de las grandes plataformas de la compañía. Los usuarios mantendrán su cuenta, biografía y verificación y sus seguidores recibirán una notificación para que puedan seguirlos en la nueva red.
No solo eso. Según precisa Lia Haberman, habrá un inicio de sesión único con el nombre y contraseña de Instagram y se conservará información relevante, como las cuentas bloqueadas y palabras que los usuarios hayan ocultado en Instagram. Las pautas de comunidad serán de hecho las mismas para ambas plataformas.
Un primer vistazo… y algunas claves. No todo son descripciones, directrices y pautas. Haberman ha compartido también una imagen, una especie de diapositiva de presentación que muestra además algunos detalles sobre la nueva aplicación. La foto refleja un feed que recuerda a una combinación de Instagram y Twitter y en el que se muestran los seguidores y contenidos recomendados. En la presentación se apuntan que será compatible con otras aplicaciones, como Mastodon, lo que ahonda en el carácter descentralizado que ya ha anunciado la empresa.
«Los usuarios de esas otras aplicaciones podrán buscar, seguir e interactuar con su perfil y contenido si es público o si es privado y aprobarlos como seguidores», cita la presentación, apuntando a una compatibilidad que podría conseguirse a través de ActivityPub , que Meta ha estado explorando junto con otras compañías.
Texto sí, pero limitado. Haberman precisa que se podrán publicar hasta 500 caracteres, adjuntar fotos, vídeos de hasta cinco minutos, links e interactuar con otros contenidos mediante likes, respuestas y reposts. Incluirá herramientas de moderación para el control de quién puede mencionar y responder y permitirá bloquear o denunciar spam. En cuanto a seguridad, usa la autenticación en dos pasos. Al menos de momento, Meta no tendría planes de monetización.
Imagen de portada: Anthony Quintano (Flickr)
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