¿Qué pasa cuando metes comida caliente al refrigerador? – El Sol de Zamora
Morelia, Michoacán (OEM-Infomex).- En un intento de cuidar los alimentos y preservarlos frescos por más tiempo, muchas personas cometen el error común de meter la comida caliente al refrigerador. Sin embargo, esta acción tiene consecuencias negativas tanto para nuestra salud como para el correcto funcionamiento del electrodoméstico.
Los expertos en calidad y seguridad alimentaria afirman que meter alimentos calientes en el refrigerador puede tener un efecto significativo en su funcionamiento y calidad del alimento. El razonamiento se basa en principios científicos que debemos comprender para garantizar una manipulación segura de nuestros alimentos.
Es decir, que cuando la comida caliente se introduce en el refrigerador, el aparato trabaja para reducir la temperatura interna y enfriar, por lo que, esto puede provocar un aumento en la temperatura ambiente del refrigerador y, como resultado, afectar a los otros alimentos de su interior.
Asimismo, el exceso de calor dentro de la nevera puede contribuir al crecimiento de bacterias y microorganismos indeseables, por lo que esto aumenta el riesgo de contaminación cruzada y deterioro de los alimentos.
Además, este proceso también puede sobrecargar el compresor del refrigerador, ya que este compresor está diseñado para funcionar dentro de ciertos parámetros de temperatura, por lo tanto, si se mete comida caliente se reduce su vida útil y al mismo tiempo aumenta el consumo eléctrico, ya que trabaja más el propio electrodoméstico.
Recomendaciones para manejar los alimentos calientes
Se recomienda dejar que los alimentos se enfríen a temperatura ambiente durante un tiempo antes de refrigerarlos. Por ejemplo, puedes utilizar métodos como sumergir el recipiente en agua fría o colocarlo en una bandeja de hielo para acelerar el proceso de enfriamiento.
Es importante mencionar que esta recomendación no se aplica a alimentos perecederos, como carnes crudas o alimentos lácteos, los cuales deben ser refrigerados de inmediato para evitar el crecimiento de bacterias dañinas. No obstante, cuando se trata de platos cocidos, sopas o alimentos preparados, es fundamental permitirles enfriarse adecuadamente antes de ingresar al refrigerador.