¿Cambiar el celular impacta el medio ambiente? – elDinero
Hoy, más del 60% de la población mundial posee un teléfono móvil, y la adopción de teléfonos inteligentes va en aumento. En República Dominicana, hay unas 9,735,351 conexiones celulares móviles a 2022. Esa cifra representa el 82.9% de la población. No es para menos, ¿quién no desea tener lo último en tecnología móvil? Los Smartphone son el equivalente a una computadora.
Cada año, las marcas de celulares bombardean a la población con nuevos y atractivos modelos, sin embargo, lo que suele pasar desapercibido es que, la producción en masa de teléfonos inteligentes ha exacerbado una amplia gama de crisis ambientales, incluida la deforestación y la contaminación del agua.
Según las cifras actuales, se generan anualmente más de 52 millones de toneladas de desechos electrónicos en todo el mundo. En 2022, los investigadores estimaron que de los aproximadamente 16,000 millones de teléfonos que posee la gente en todo el mundo, unos 5,300 millones se convertirían en desechos.
Por si el destino final de esos miles de dispositivos electrónicos no fuera suficiencia, su proceso de fabricación representa alrededor del 85% de su huella de carbono, lo que lo convierte en el dispositivo más dañino para el medio ambiente. Estas emisiones provienen principalmente de la extracción, transporte y producción de metales.
En ese contexto, para aquellos que están siendo más conscientes con el medio ambiente, cambiar de teléfono celular, por algo simple que parezca, representa un impacto ambiental. Según datos recientes, la generación de residuos electrónicos, también conocidos como e-waste, rondó las 74,000 toneladas métricas en 2021 en República Dominicana. Durante el mismo año, el país se posicionó como uno de los mayores generadores de basura electrónica en América Latina y el Caribe.
Responsabilidad
Para conversar sobre el tema, elDinero consultó a Won Choi, director general, y María Alejandra Montás, jefa de equipo de electrónica de consumo de Samsung Electronics para República Dominicana. Aunque explican que están comprometidos con la innovación constante y el lanzamiento de nuevos modelos de teléfonos y equipos tecnológicos, entienden la importancia de extender la vida útil de los productos.
“Constantemente estamos ampliando la vida útil de nuestros productos a través de actualizaciones continuas de software y pruebas de durabilidad bajo diversas condiciones para permitir que los consumidores usen los productos el mayor tiempo posible”, dijo Montás.
De hecho, coincidieron en que reconocen la importancia de extender la vida útil de los dispositivos electrónicos en el contexto actual de la tecnología. En ese sentido, destacan que al extender la vida útil de los dispositivos, se reduce la cantidad de residuos electrónicos generados.
“La rápida evolución tecnológica ha llevado a un aumento significativo en la cantidad de dispositivos desechados prematuramente. Al fomentar la durabilidad y la reparación de los dispositivos, buscamos contrarrestar este problema y promover un enfoque más responsable”, sostuvo Choi.
Consecuentemente, al alargar la vida útil de los dispositivos, se reducen los recursos naturales utilizados en la fabricación de nuevos productos. Esto implica una menor extracción de materiales y una menor huella de carbono asociada a la producción y el transporte. “Al evitar la necesidad de adquirir nuevos dispositivos con frecuencia, contribuimos a un uso más eficiente de los recursos y a la preservación del medio ambiente”, dice Matos.
Asimismo, al mantener los dispositivos en funcionamiento durante más tiempo, también se reduce la demanda de energía necesaria para la fabricación y distribución de nuevos dispositivos. Esto tiene un impacto positivo en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y en la mitigación del cambio climático.
Impacto económico
El impacto económico de extender la vida útil de los dispositivos es significativo, ya que, en primer lugar, al extender la vida útil de los dispositivos, se ahorra recursos naturales que de otro modo se utilizarían para producir nuevos dispositivos.
“Esto puede ayudar a reducir los costos de fabricación y hacer que los dispositivos sean más accesibles para los consumidores”, añade Matos. El manejo adecuado de los residuos electrónicos es costoso, por lo que, al reducir su cantidad, disminuye el dinero destinado tanto a las empresas como a los gobiernos destinan para esos fines.
La vida útil de los dispositivos, también se generan empleos en la industria de la reparación. “Esta industria está en crecimiento y alentar su desarrollo a través de la prolongación de la vida útil de los dispositivos puede generar más empleo y oportunidades económicas”, explica Choi.
Sin embargo, promover una sociedad menos consumista en términos de aparato tecnológico, requiere de medidas de los distintos sectores. Por otro lado, detallan que algunas de las barreras económicas que podrían impedir a los consumidores extender la vida útil de sus dispositivos son el costo de las reparaciones, la falta de disponibilidad de piezas de repuesto o la falta de conocimientos sobre cómo reparar dispositivos.
Aun así, citan algunas estrategias que se pueden implementar para superar esas barreras. Por ejemplo, hicieron referencias a las reparaciones, que indican podrían ser más asequibles. “En ese caso, los fabricantes pueden ofrecer precios más bajos para piezas y mano de obra, lo que haría que las reparaciones sean más asequibles”, destaca Choi.
También pueden ofrecer garantías extendidas o planes de seguros que cubran los costos de reparación. En ese sentido, Montás ejemplifica con Samsung Care+, uno de los servicios que ofrecen.
“Otra de las opciones es hacer que las piezas de repuesto estén más disponibles. Los fabricantes pueden trabajar con proveedores externos para asegurar la disponibilidad de piezas de repuesto. También pueden facilitar a los consumidores la compra directa de piezas de repuesto”, añade.
Al implementar estas estrategias, los fabricantes pueden facilitar y hacer más asequible para los consumidores la extensión de la vida útil de sus dispositivos. Esto, aseguran, ayudaría a reducir la cantidad de residuos electrónicos y ahorrar dinero a los consumidores.
Asociaciones
En República Dominicana y América Latina, existen oportunidades económicas para empresas especializadas en servicios de reparación y extensión de vida útil de dispositivos electrónicos. En ese sentido, los expertos señalan que ofrecer servicios asequibles, educar a los consumidores sobre los beneficios de reparar dispositivos, asociarse con minoristas y distribuidores, proporcionar una amplia gama de servicios, utilizar piezas y mano de obra de alta calidad, y ofrecer garantías en las reparaciones son estrategias clave para aprovechar estas oportunidades.
“Estas acciones ayudarán a construir una reputación de calidad y confiabilidad, atrayendo a más clientes y aumentando los beneficios de las empresas”, dice Montás. El alto costo de las reparaciones, de los programas de garantías extendidas y la inversión en promoción de programas de extensión de vida útil puede dificultar que las empresas ofrezcan servicios asequibles, añade por otro lado, Choi.
Sin embargo, existen enfoques como diseños modulares, piezas estandarizadas, opciones de reparación de autoservicio y asociaciones con proveedores externos que pueden reducir los costos de reparación.
“Además, incluir garantías extendidas con otros productos, utilizar estrategias de marketing efectivas y recopilar datos para tomar decisiones informadas son otras acciones que pueden ayudar a superar los desafíos financieros y garantizar el éxito de los programas de extensión de vida útil de dispositivos”, comenta.
Los fabricantes, consumidores y autoridades regulatorias tienen una responsabilidad conjunta para fomentar la extensión de la vida útil de los dispositivos electrónicos, sostiene Montás. “Los fabricantes pueden diseñar dispositivos que sean fáciles de reparar y que utilicen materiales sostenibles. Por otro lado, los consumidores pueden optar por adquirir dispositivos que estén diseñados para durar y que sean reparables”, agrega.
Asimismo, cuidar los dispositivos correctamente y mantenerlos limpios y libres de polvo, sirve para cuidar y alargar su durabilidad. Choi, por otro lado, destaca que las autoridades regulatorias pueden establecer estándares de reparabilidad de dispositivos y exigir a los fabricantes el uso de materiales sostenibles. Además, pueden proporcionar incentivos para la producción de productos sostenibles.
“Juntos, podemos hacer una diferencia significativa en la reducción de los residuos electrónicos y en la protección del medio ambiente”, explica. Es así como coinciden que las empresas pueden adaptar sus modelos de negocio para priorizar la extensión de la vida útil de los dispositivos y mantener su rentabilidad financiera.
Enfocarse en la calidad en lugar de la cantidad y crear una economía circular también son estrategias adicionales para adaptar los modelos de negocio. Estas acciones ayudarán a proteger el medio ambiente y crear un futuro más sostenible. Estas medidas son fundamentales para promover la responsabilidad ambiental y satisfacer las necesidades de los consumidores.