Estos son los nuevos mini rovers de la NASA que se dedicarán a la exploración de la Luna
Los nuevos y vanguardistas rovers de la NASA que darán un paso de gigante en la exploración de la Luna.
La NASA siempre ha puesto en liza distintos rovers para la exploración lunar y también de Marte, pero esta nueva versión promete ofrecer un gran salto en el ámbito de la exploración espacial.
En concreto, ahora la NASA ha anunciado que ya tienen listos un conjunto de mini rovers que van a dirigir a la Luna para probar todas sus nuevas habilidades en la exploración de nuestro satélite.
Estos pequeños rovers son del tamaño de una maleta y se estima que llegarán a la superficie de la Luna en 2024 realizando una serie de experimentos para demostrar que pueden trabajar de forma autónoma.
Estos mini rovers forman parte del proyecto llamado CADRE (Cooperativa Autónoma de Exploración Robótica Distribuida) de la iniciativa CLPS de la NASA y que tiene como objetivo llevar cargas útiles de tecnología a la Luna utilizando módulos de aterrizaje comerciales.
Estos tres pequeños rovers viajarán en uno de los módulos de aterrizaje y tras aterrizar en la Luna cargarán sus paneles solares para prepararse para los distintos experimentos.
Cada uno de los pequeños rovers utilizará sensores y radios para moverse con seguridad por la superficie lunar y también para comunicarse con el resto del equipo.
«La única instrucción es, por ejemplo, ‘Ve a explorar esta región’, y los rovers resuelven todo lo demás: cuándo conducirán, qué camino tomarán, cómo maniobrarán alrededor de los peligros locales«, dijo. Jean-Pierre de la Croix del JPL, investigador principal de CADRE. «Solo les dices el objetivo y ellos tienen que determinar cómo lograrlo«.
Su trabajo es crear una imagen 3D de la estructura del subsuelo
En esta misión de 14 días tendrán que prepararse para conducir en formación y mantener el rumbo, evitando obstáculos; también tendrán que mapear una superficie de 400 m² usando sus cámaras, entre otros menesteres.
Los rovers también se caracterizan porque serán capaces de escanear hasta 10 m debajo de la superficie en unos radares de penetración de última tecnología.
Básicamente lo que van a hacer es crear una imagen 3D de la estructura del subsuelo, permitiendo la recopilación de datos de regiones simultáneas en la superficie lunar.
También deberían poseer suficiente capacidad informática para ejecutar software de autonomía cooperativa.