Desea Higinio que se levante la veda para salir a las capturas y sentir la brisa y la calma del mar
MAZATLÁN._Higinio, de 77 años, es un hombre que a pesar de la situación crítica por la que atraviesa la actividad pesquera, ansía volver a sentir la brisa y la calma que solo le da el mar: esta es la historia.
A los 10 años, después de dejar el tercer año de escuela, Higinio Robles Arellano decidió que su vida se la entregaría al mar, especialmente a la pesca.
Con más de 60 años en el oficio, Robles Arellano es un hombre de aventuras, de historias y de experiencias, pero sobre todo de conocimiento de la situación actual del sector pesquero.
Señaló que una de las razones por la cual esta actividad ya no es rentable, como años atrás, es por la clandestinidad y saqueo que muchos cometen aún durante el tiempo de veda.
“El negocio ha estado crítico (…) Así a lo descarado y a lo bruto, por tanto saqueo clandestino por toda la costa; por todos los campos pesqueros que hay aquí en México. Esa es la escasez. No respetan las vedas. No hay vigilancia quien cuide”, expresó Higinio.
A pesar de que muchas dependencias y autoridades son las responsables de vigilar que se cumplan las normas, Higinio señala que estas no cumplen su función debidamente, pues solo se encuentran en su escritorio sin actuar.
“Nosotros teníamos camarón, mucho camarón aquí en esta costa, pero desde que empezó el saqueo clandestino, de ‘changuerismo’, de dejarlos pescar porque tienen funcionarios, tanto funcionarios pesqueros, que no les hacen nada”, añadió Robles Arellano.
Dio a conocer que dentro del sector pesquero se han topado con la violencia cuando se trata de ir a ‘vigilar’, pues no se les pueden acercar a ninguno del sector del ‘changuerismo’, de bahía u otros porque pueden arrojarte un chinchorro y amarrarte; la situación empeora cuando ninguna autoridad hace nada al respecto, pues es mucha la cantidad de personas.
Subrayó que los armadores de los barcos se han ‘restringido’ con cada uno de sus trabajadores porque el apoyo por parte del Gobierno es casi nulo; el diésel, el mantenimiento de la embarcación y el pago a sus colaboradores agudiza más esta problemática.
Por lo que, muchos, al iniciar la veda, deciden emplearse en otras actividades para poder subsistir, pero Higinio, con semblante y ánimo aventurero, espera el levantamiento de la veda para volver a zafrar, aunque de momento, desconoce cuándo será esa fecha.
“Mientras tenga uso de razón, voy a seguir trabajando, ahora cuando ya no me pueda subir a ningún barco, entonces sí, pues ya ni modo, pero el patrimonio, todo lo que tengo es gracias a la pesca”, expresó Higinio.
Comentó que una de las razones por las que decide volver a aventurarse en el mar, esto después de ser pensionado, es porque le genera mucha emoción el ir a pescar.
“Tengo muchos amigos míos que han trabajado hasta que ya no pueden y nomás dejan de trabajar y van pal’ ‘pozo’; se debilitan, porque es una emoción salir, yo me emociono mucho saliendo a viaje, que vaya saliendo que ya voy a pescar, durante seis meses que no trabajo, eh, así que voy con gusto y con ganas de salir”, expresó.
Higinio comentó que cuando sale a pescar, decide abrir las ventanas para sentir la brisa del viento y la marejada, por lo que, espera volver a vivir esas sensaciones y aventuras, esto, a pesar de la situación crítica del sector pesquero.