Retoño del "Árbol de la Noche Triste" será protegido por municipio – El Sol de San Luis
A más de cinco años de haber sido plantado en la Alameda “Juan Sarabia”, el retoño del histórico árbol de la “Noche Triste”, ahuehuete en el que supuestamente el conquistador español Hernán Cortés lloró su derrota ante los aztecas, pasa desapercibido para quienes visitan ese pulmón de la ciudad.
Donado en 2018, el “nieto” del Árbol de la Noche Triste es, a su vez, “hijo” del ahuehuete que se encuentra en dolores Hidalgo, Guanajuato; contaba con una placa en la que se leía su origen, misma que fue retirada durante el trienio del alcalde Xavier Nava -que igual retiró todo vestigio de su antecesor- y hoy paseantes transitan frente a él sin voltear a mitrarlo.
Sin embargo, es hasta la actual administración municipal que se le puso atención, y fue enlistado como uno de los árboles que se protegerán de manera física y jurídica por tener trascendencia histórica.
Antes de ser plantado, el retoño fue sometido a cuidados y se le aclimató, y finalmente se resolvió plantarlo en la alameda, que fue el huerto del convento de la orden de los carmelitas, donde hoy hay 30 especies diferentes de árboles al que se le sumó la nueva aportación.
En marzo de 2018, en ceremonia a la que asistieron autoridades de Dolores Hidalgo, Guanajuato, el “nieto” del “Árbol de la noche Triste” fue colocado en el lado norte de la alameda.
Tras años de su plantación, se le nota un poco más alto y se ignora si requiere de algún tratamiento especial.
La leyenda señala que Hernán Cortés lloró su derrota ante los aztecas en 1520, junto a un enorme ahuehuete que se ubicó en Tacuba en la Ciudad de México, luego que los mexicas vencieron a los españoles, lo que trajo consigo que el conquistador perdiera la mitad de su tropa.
El árbol original se secó en 1980 por actos vandálicos, pero en años anteriores varios de sus retoños fueron sembrados en distintas ciudades de diferentes estados del país como Guanajuato, Querétaro, Michoacán y hasta Baja California, y ahora en San Luis Potosí.
Cabe citar que la protección de árboles históricos en la capital potosina, nace del programa “Pulmones Urbanos”, que además de la reforestación de más de 140 mil árboles, contempla la conservación de los mismos.