Militares desmantelan campamentos de minería ilegal en Amazonia ecuatoriana
Alrededor de 1.000 policías y militares ingresaron el jueves a dos provincias del centro norte de la Amazonia ecuatoriana para desmantelar campamentos de minería ilegal que extraen principalmente oro y contaminan los ríos con metales pesados.
El presidente Guillermo Lasso publicó en su cuenta de la red social X, antes llamada Twitter, que las operaciones simultáneas contra la minería ilegal se realizaron en las provincias de Orellana y Napo.
Agregó que con ello “estamos protegiendo la naturaleza y evitando su destrucción por parte de organizaciones criminales que hacen negocio explotando nuestros recursos”.
Los campamentos ilegales suelen estar dotados de maquinaria pesada y otros equipos tecnológicos y operan sin ningún tipo de cuidado por el ambiente, dejando a su paso una gran destrucción del entorno.
De acuerdo con estimaciones de analistas y académicos, que han señalado la imposibilidad de precisar el monto de esas operaciones, la minería ilegal mueve entre 800 y 1.000 millones de dólares anuales, especialmente en la comercialización de oro.
La presidenta ejecutiva de la Cámara de Minería, María Eulalia Silva, dijo a The Associated Press que la minería ilegal “viene adjunta a otras actividades delictivas como el narcotráfico” e incluso en muchos sectores con condiciones laborales de esclavitud.
Observó que mientras las actividades ilegales se han incrementado en todo el país “la inversión internacional en la minería formal está disminuyendo notablemente”.