Eficiencia energética y compromiso con la protección del medio ambiente en Bizkaia – Deia
Zabalgarbi S.A. es una planta de valorización energética de residuos que presta servicio a más de 100 municipios de Bizkaia. Ubicada en Bilbao desde 2005, se dedica al tratamiento de residuos mediante la utilización de tecnologías innovadoras respetuosas con el medio ambiente y el entorno.
Cada año, la planta se encarga de tratar 225.000 toneladas de residuos no reciclables con los que es capaz de generar 750 GW/h de electricidad, lo que equivale al 35 % de la energía que se consume en los hogares de Bizkaia durante el mismo período.
Zabalgarbi promueve e integra la innovación en su estrategia, desde la mejora constante de sus procesos hasta la renovación de sus equipos. Este año, sus principales líneas de actuación están centradas en la descarbonización, el aumento de la eficiencia energética y la búsqueda de nuevos proyectos en torno a la energía renovable.
Proyecto de sustitución del filtro de mangas
Esta hoja de ruta la lleva a cabo liderando varios proyectos de innovación, entre los que destaca el diseño y construcción del nuevo filtro de mangas, una pieza esencial encargada de la neutralización y depuración de los gases, que se puso en marcha en junio de este año.
Este proyecto se trata de la mayor intervención en la planta desde su construcción y ha supuesto una operación complicada a nivel técnico. Las fases más delicadas del proyecto han sido la retirada del filtro antiguo y la posterior introducción de los módulos que componen el nuevo, de más de 120 toneladas de peso y 20 metros de altura.
En términos de eficiencia e impacto medioambiental, el nuevo filtro está diseñado para reducir significativamente las emisiones de partículas y los mantenimientos a realizar. Se estima que, con su instalación, se reducirán en un 50% las partículas, así como una disminución muy significativa en la reposición de mangas.
Reducción de las emisiones y eficiencia energética
Otro proyecto que refleja el compromiso de Zabalgarbi con la sostenibilidad energética y la reducción de la huella de carbono incluye la estación de suministro de Gas Natural Comprimido (GNC), ubicada dentro de las instalaciones de la planta. La gasinera está operativa durante las 24 horas del día, cuenta en la actualidad con 25 clientes y 63 vehículos autorizados para el repostaje. De éstos, 40 son camiones de transporte de residuos. Esta transición de camiones de gasoil a GNC ha evitado la emisión de 470.600 kg de CO2 a la atmósfera.
El nuevo sistema DENOX de la planta consiste en la digitalización y automatización de la inyección de amoniaco, con la introducción de un tercer nivel en el interior del horno-caldera. Con la implantación de un sistema automático de control termográfico del horno se consigue una reducción del 31,5% de NOx a través de la regulación del amoniaco.
La planta también ha puesto en marcha recientemente el nuevo sistema de micro explosiones, reemplazando al tradicional sistema de soplado de vapor y al uso de explosivos controlado que se venía utilizando en la limpieza del horno-caldera. Este sistema mejora la operativa y el mantenimiento del horno, aumentando la valorización eficiente de los residuos..
A través del desarrollo y puesta en marcha del proyecto de turbina fría para la eficiencia operativa, se ha conseguido reducir en casi un 36% el consumo de gas necesario para el sobrecalentamiento del vapor, sin modificar las condiciones técnicas de diseño de la planta. También la reciente instalación de un laminado de poliéster metalizado de última generación en todas las ventanas del edificio de oficinas ha supuesto un ahorro anual de energía de 3.313 kW y una reducción de la emisión de 2.153 Kg de CO2.
Innovando en la búsqueda de soluciones sostenibles
Zabalgarbi continúa trabajando en proyectos e iniciativas que resulten más sostenibles y eficientes. Con el objetivo de conseguir una reducción del consumo de gas en casi un 90%, la planta se encuentra actualmente en búsqueda de soluciones que permitan el recalentamiento del vapor de la valorización de residuo hasta la temperatura adecuada para el mejor funcionamiento de la turbina de vapor.
También está trabajando en la posible implantación de la técnica de modelización del aire de combustión de la HRB (Heat Recovery Boiler) para mejorar la gestión de la mezcla aire-combustible, lo que concluiría en una reducción del consumo de gas y de las emisiones de NOx.
Dentro del programa SPRI, Zabalgarbi está desarrollando el proyecto piloto para la detección de residuos voluminosos en rampa de descarga. Esta iniciativa consiste en la detección de impropios mediante la instalación de un detector de vibraciones en una rampa de descarga de residuos. De este modo, se reduciría el riesgo de indisponibilidad de la planta por la detección de impropios que puedan causar un daño grave en la instalación.