Super Mario RPG promete ser el mejor remake en la historia de Nintendo
Fiel a los tropos del género inspirado en las partidas de Calabozos y Dragones, el protagonista y el resto de su cofradía de alegres compañeros van subiendo de nivel con cada victoria. Al crecer, el jugador debe elegir cuál de sus estadísticas mejorar, ya sea Magia, Salud o Ataque (+ Defensa). El mundo también posee aldeas en las cuales es posible conocer nuevos personajes, alistarse en búsquedas secundarias, vender basura o comprar ítems, armas, artefactos que añaden habilidades pasivas o armaduras que elevan la resistencia ante ataques mágicos o físicos. Elegir bien los accesorios que usaremos es esencial para incrementar nuestras posibilidades de ganar.
Al igual que en Super Mario Bros. Wonder, este título transcurre dentro de un enorme mapa a modo de juego de mesa que puede ser explorado con completa libertad. Cada escenario o stage cuenta con su propia identidad, enemigos y música característica, así como jefes y retos únicos.
El objetivo de toda la aventura es recuperar siete estrellas que conceden deseos. A lo largo de todo el proceso Mario se unirá a viejos y nuevos aliados e incluso hará las paces con su archienemigo Bowser. Todo sea por ponerle fin a los planes de Smithy, el misterioso antagonista que amenaza con desaparecer el Reino Champiñón y a todos sus habitantes.
Las verdaderas estrellas del show
Lo que más destaca de este juego de rol no son sus mecánicas, impecable presentación o divertido ritmo, sino sus personajes. La mayoría tiene diálogos hilarantes y Mario siempre se ve envuelto en situaciones cómicas que añaden ligereza a toda la experiencia.
Desde Bowser hasta Geno, una especie de ser divino que adoptó la forma de un muñeco de madera al estilo Cascanueces, tienen su propia personalidad y manera única de abordar los problemas y de ver la vida. Incluso los personajes secundarios son memorables, por breves y mudas que sean sus apariciones.