¿Cómo afecta la crisis del Mar Rojo a las empresas valencianas?
El último golpe a la actividad económica ha llegado con la crisis en el Mar Rojo que conecta el Mediterráneo y Europa con el Lejano Oriente a través de Suez, después de que los gigantes marítimos hayan anunciado que cancelan sus rutas a través de esa zona ante los ataques terroristas de los hutíes de Yemen. El efecto inmediato que más notarán las empresas valencianas es el encarecimiento del transporte marítimo, con una subida de los fletes tras más de un año de bajadas, según un informe elaborado por Cámara Valencia.
Con todo, para el organismo empresarial, el mayor impacto que puede tener en la actividad empresarial de la Comunidad Valenciana es el indirecto, al ser un elemento más que contribuya a la ralentización del comercio mundial y de los grandes mercados, principalmente los europeos, de las firmas valencianas. Un nuevo frenazo al comercio exterior, en un momento en que las exportaciones autonómicas arrastran varios meses en negativo con sectores como la cerámica y el automóvil que no levantan cabeza.
Según recoge el documento, el 63% del total de toneladas que las empresas de la Comunidad Valenciana comercializan con el resto del mundo, incluyento tanto exportaciones como importaciones, se realizan por vía marítima. Y una cuarta parte de lo que viaja por barco se hace con el mercado asiático, a través del Canal de Suez, la ruta afectada ahora por los ataques.
Los efectos de no poder utilizar esa ruta, la más corta y en la que además el puerto de Valencia es uno de los mejor posicionados geográficamente, se va a dejar notar en los costes de transporte marítimo. El informe detalla que los fletes, el precio del envío de los contenedores, van a aumentar, aunque considera que se quedarán lejos de los máximos de 2021 cuando la saturación de tráficos después de la pandemia los multiplicó a máximos historicos. Según la Cámara, «su repercusión en precios finales será moderada y no se notará hasta el segundo trimestre de 2024».
Además, recuerda que «rutas mas largas implicarán un aumento de las emisiones de carbono por el transporte marítimo, en un momento en el que Europa pone en marcha en enero de 2024 la aplicación de los ETS a los puertos europeos». Es decir, conllevará costes aún más elevados a las rutas transoceánicas.
Cadenas de suministro más diversificadas
Los empresarios valencianos ya tuvieron que realizar un proceso de diversificación de sus proveedores y optimizar la gestión de los suministros precisamente tras esa crisis en la cadena de suministros que golpeó el abastecimiento. Por ello, ahora la Cámara considera que los problemas de suministros que genere este conflicto impactarán con menor intensidad en la actividad industrial y comercial.
En el caso de las relaciones comerciales y exportaciones con Asia, señala que «no se esperan grandes cambios en la evolución» ya que mantenía una senda descendente, salvo para mercados como la India y algunos países como Taiwan y Singapur, en los que espera que por su dinamismo mantendrán su comportamiento al alza.
En el caso del precio del petróleo, básico en los combustibles y para sectores como el químico, la Cámara considera que si el conflicto, que a su vez se ha originado por la guerra de Israel en Gaza, se circunscribe al Mar Rojo y Canal de Suez, el suministro de petróleo de Oriente Medio no se verá afectado su precio en los mercados internacionales no aumentará de forma notable.
Efectos indirectos
Sin embargo, los efectos sobre los principales mercados de las empresas valencianas sí que pueden resultar más dañinos. El documento destaca que «el retraso en el proceso de recuperación económica de los países europeos que pueda provocar este conflicto sí que incidirá en la evolución de las exportaciones valencianas a estos mercados en el medio plazo».
Así, considera que al llegar en un momento de «retroceso de los intercambios comerciales de bienes a nivel mundial y de fuerte desaceleración económica e incluso recesión en países como Alemania«, si se alargase o agravase «alejaría en el tiempo el inicio de la senda de recuperación prevista para mediados de 2024».