Durante el Eclipse Solar buscarán con el Gran Colisionador de Hadrones descifrar la existencia de la materia oscura
El Gran Colisionador de Hadrones (LHC) de la CERN que se encuentra a 100 metros de profundidad en la frontera entre Francia y Suiza, que es un anillo gigante de 27 kilómetros de circunferencia.
Dentro de la estructura, los protones son acelerados a velocidades cercanas a la de la luz. Sus colisiones generan una explosión de energía que permite estudiar las partículas fundamentales del universo.
El día del eclipse, comenzará una nueva misión para el colisionador que es atrapar la materia oscura.
En el universo, solo el 5% de la materia real es visible: estrellas, planetas y galaxias. El otro 95 % del cosmos es una vastedad desconocida, donde la materia oscura ocupa aproximadamente el 27%. Los científicos estiman que esta sustancia invisible e hipotética domina la masa del universo.
Los investigadores ya iniciaron pruebas en el LHC, enviando protones alrededor del anillo de imanes para aumentar su energía y asegurar su funcionamiento. En los próximos días, la CERN los lanzará a casi la velocidad de la luz por un túnel para crear condiciones similares a las que se presentaron un instante después del Big Bang.
Los científicos han teorizado sobre 17 partículas fundamentales que conforman el universo. En 2012, la Organización Europea para la Investigación Nuclear confirmó la existencia de uno de estos grupos de partículas mediante su gran colisionador: el Bosón de Higgs. El hallazgo de la también llamada partícula de Dios fue reconocida con el Premio Nobel.