Narra libro infantil la biografía de Pessoa
▲ Los más geniales amigos imaginarios, de Flor Aguilera, cuenta con ilustraciones de la artista chilena Karina Cocq.Foto cortesía de la escritora
Daniel López Aguilar
Periódico La Jornada
Miércoles 29 de mayo de 2024, p. 3
En 1888 nació un bebé que vivió sus primeros años en Lisboa, capital de Portugal. Su nombre completo era Fernando Antonio Nogueira Pessoa, quien a lo largo de su vida escribió una vasta y diversa obra que incluye poemas, relatos, crónicas, teatros, aforismos y ensayos.
Este personaje, reconocido como una figura central en la literatura moderna, también creó no uno, ni dos, sino más de 70 heterónimos, cada uno con nombre, personalidad e, incluso, características físicas e historias propias, pero parecidos a él en una cosa: escribían literatura.
Con un estilo accesible y encantador, la poeta, ensayista y narradora Flor Aguilera presentó su nuevo libro infantil, Los más geniales amigos imaginarios, publicado por la editorial Cidcli, en el que narra la biografía de Pessoa y la de algunos de sus fieles camaradas ficticios.
A los 19 años tomé mi primer taller de poesía con Óscar Oliva, quien nos introdujo a los heterónimos de Pessoa, que a diferencia de los seudónimos, son seres humanos inventados por el autor para firmar su obra literaria (sin ser él mismo), pero que, como cualquiera, tenían un nombre e historia de vida
, señaló Aguilera en entrevista con La Jornada.
“Haciendo honor a su apellido –Pessoa significa persona–, el poeta portugués creó innumerables heterónimos con ideas políticas, educación especial y relaciones sentimentales que le permitieron explorar diferentes perspectivas y voces poéticas.
¿Te imaginas la expresión de un niño cuando descubre a un escritor tan extraordinario? Él era tan buen poeta, tan inteligente y talentoso que se siguen publicando libros de su vida y de su obra e incluso las nuevas generaciones lo admiran y adoptan como un amigo consentido.
Además de profundizar en aspectos de su niñez, su vida sentimental, su aspecto físico o su trabajo literario, los niños de 10 años en adelante podrán leer algunos poemas de Pessoa, entre ellos el primero que escribió (a los seis años) dedicado a su mamá: ¡Oh, tierras de Portugal! Oh, tierras donde nací; por mucho que yo las quiera, no las querré más que a ti
.
Otros apartados del ejemplar describen a los grandes poetas clásicos ingleses
que admiró, como William Shakespeare, Lord Byron, Percy Shelley, Mary Godwin; a escritores portugueses, entre ellos, Cesario Verde y Teixeira de Pascoaes, y a algunos de sus amigos imaginarios, como Alberto Caeiro, Álvaro de Campos, Bernardo Soares, Ricardo Reis y María José, cuyas semblanzas se desarrollan.
Hacen falta muchos otros amigos imaginarios, pero por ahora ya conociste a los que Fernando más quiso y a la única mujer que se ha encontrado entre sus heterónimos. Por sus poemas, ensayos e inigualable ingenio, Pessoa no se puede comparar con algún otro escritor vivo o muerto
, se advierte en el volumen.
“Su gran creatividad, sentido del humor, sensibilidad, vida en soledad y nostalgia de la infancia lo llevaron, muy probablemente, a vivir rodeado de gente y a crear cosas grandes e importantes junto con sus compañeros ficticios.
“Existe en la ciudad portuguesa de Oporto la Universidad Fernando Pessoa, ese nombre y apellido son sinónimos de poesía y singularidad. Espero que tengas la sensación de conocerlo mejor y que él, a su vez, se haya convertido en tu más triste, creativo, curioso –y, sobre todo, muy genial– amigo imaginario.”
Los pequeños lectores podrán dibujar a sus compitas imaginarios en el ejemplar, y si no tienen ninguno, sólo hace falta inventarlo
.
Flor Aguilera, también autora del podcast de poesía Como Pizarnik en París, disponible en plataformas digitales como Spotify y Apple, manifestó su agrado por las ilustraciones que realizó la artista chilena Karina Cocq, quien reside en Barcelona, pero “se nota que conoce la tierra natal de Pessoa.
“Nunca he tenido contacto con ella; después de que la editorial recibió el manuscrito de mi obra, optó por que Cocq se encargara de las ilustraciones, las cuales hablan por sí mismas, pues describen acertadamente lo que representa caminar por las calles de Portugal; también asimiló muy bien las personalidades de los heterónimos.
“Karina hizo un trabajo impecable y realmente se adentró en este universo literario. La prosa de Pessoa es reconfortante, nos transmite varios mensajes esenciales, como que ‘hay que ser múltiples en nuestro espacio’, ‘a no tener miedo a jugar’, e incluso a asimilar que ‘vivir es crear’.
El autor lusitano mantuvo vivo su espíritu infantil; fue un personaje encantador, lleno de dulzura y dolor, que no tuvo miedo de ser él mismo. Los niños son tan receptivos que reciben cada texto con gratitud, quizá se trate (para ellos) de un cuento más, pero cuando leen una historia fuera de lo común, la perciben inmediatamente.