Enorgullece a Real del Monte su patrimonio industrial
Reyes Martínez Torrijos
Periódico La Jornada
Miércoles 17 de julio de 2024, p. 3
En Real del Monte, Hidalgo, existe un patrimonio industrial poco explorado y reconocido a nivel nacional, cuya investigación hace revalorar el aporte de gente para desarrollar la manufactura y va creando una cultura
, dijo Belem Oviedo, directora del Archivo Histórico y Museo de Minería de Pachuca.
La historiadora explicó que el patrimonio industrial es el conjunto de edificios, máquinas, herramientas, documentos y la parte inmaterial, donde, por ejemplo, están las historias y anécdotas alrededor del gremio minero o del azúcar. Para el primero, en el estado de Hidalgo está la fiesta señor de Zelontla, el patrono de los mineros
.
Comentó que el movimiento por la conservación del patrimonio industrial comenzó en Europa. Hay un documento que sigue la gente que estudia este tema: la Carta de Nizhny Tagil, un sitio industrial en el norte de Rusia donde se aprobó el texto y en el que se laboraba desde mucho antes de la revolución industrial en Inglaterra
.
En México, continuó la especialista, la investigación del patrimonio industrial incluye sitios como el de la Sierra de las Navajas en Hidalgo, donde se extraía y trabajaba la obsidiana, aunque el país no ha sido particularmente productor de maquinaria, como Inglaterra o Alemania.
El arqueólogo Alejandro Pastrana ha trabajado por más de 30 años esta zona mexicana y “ha encontrado vestigios de tres etapas de nuestra historia: toltecas, teotihuacanos y mexicas, que tenían aquí talleres de lítica y donde producían lo que necesitaban para llevarlo a sus urbes, además de venderlo en Mesoamérica.
▲ Grupo de mineros en Pachuca, en 1930, y alrededor de 1921 en Mina Santa, también en la capital de Hidalgo, ambas de la colección Azapetía. Abajo, mina La Dificultad en Real del Monte, Hidalgo, en 1890, de la colección Albúmina.Foto Imágenes cortesía de la teca AHMMAC
La Sierra de las Navajas, con las minas de obsidiana, es el antecedente más importante de la minería en la región. Sostenemos que los últimos mineros de la obsidiana fueron los primeros de la plata
, continuó la Integrante del Comité Internacional para la Conservación del Patrimonio Industrial.
Después la Compañía Real del Monte y Pachuca, de origen inglés, vino a trabajar las minas mexicanas como una continuación de la actividad que se realizaba desde la época virreinal. “Aquí empieza esta historia del patrimonio industrial y de la reutilización de los sitios. En Real del Monte ya no hay minas en explotación, pero sí un legado cultural que está contribuyendo a que la gente pueda seguir viviendo de la minería.
Cuando empezamos a trabajar el primer museo en Real del Monte en 1998 no era un pueblo turístico, no había la conciencia de esta riqueza cultural que contribuye a la educación y ahora a la economía a través del turismo cultural. Real del Monte se ha posicionado en este sentido gracias a la existencia de sus museos
especializados.