Un estudio advierte de que microbios altamente adaptados «conquistan» los microondas domésticos
Los investigadores recomiendan desinfectar regularmente el electrodoméstico con una solución de lejía diluida o con un espray desinfectante
11 ago 2024 . Actualizado a las 15:26 h.
Desde la Revolución Industrial, los microbios han colonizado un nuevo tipo de hábitat tras otro: los vertidos marinos de petróleo, el plástico que flota en los océanos, los terrenos industriales abandonados e incluso la Estación Espacial Internacional.
Sin embargo, un entorno que alberga una comunidad especializada de microbios altamente adaptados está mucho más cerca del hogar: el microondas. Este hallazgo ha sido publicado por primera vez por investigadores españoles en Frontiers in Microbiology.
No solo es importante desde el punto de vista de la higiene, sino que también podría inspirar aplicaciones biotecnológicas si las cepas halladas en el interior de los microondas pueden aprovecharse en procesos industriales que requieren bacterias especialmente resistentes.
«Nuestros resultados revelan que los microondas domésticos tienen un microbioma más ‘antropizado’, similar al de las superficies de cocina, mientras que los microondas de laboratorio albergan bacterias más resistentes a la radiación», explica uno de los autores, Daniel Torrent.
Torrent y sus colegas tomaron muestras de microbios del interior de 30 microondas: 10 de cocinas de hogares particulares, otros 10 de espacios domésticos compartidos y 10 de laboratorios de biología molecular y microbiología.
En total, los investigadores encontraron 747 géneros diferentes dentro de 25 filos bacterianos. Descubrieron que la composición de la comunidad microbiana típica coincidía en parte entre los microondas domésticos compartidos y los de un solo hogar, mientras que los microondas de laboratorio eran bastante diferentes. La diversidad era menor en los microondas domésticos y mayor en los de laboratorio.
«Tanto para el público en general como para el personal de laboratorio, recomendamos desinfectar regularmente los microondas con una solución de lejía diluida o con un espray desinfectante disponible en el mercado. Además, es importante limpiar las superficies interiores con un paño húmedo después de cada uso para eliminar cualquier residuo y limpiar inmediatamente los derrames para evitar la proliferación de bacterias», recomienda Torrent.