Nissan y Honda inician oficialmente las negociaciones para su fusión
Ante la feroz competencia del mercado chino, los fabricantes de automóviles deben replantear sus estrategias comerciales. En este escenario, Honda y Nissan han dado un paso significativo al firmar un memorando de entendimiento, abriendo la puerta a conversaciones que podrían culminar en la mayor fusión de la historia del automóvil japonés, creando así el tercer mayor fabricante mundial por ventas. Los dos gigantes nipones han anunciado la firma de un acuerdo preliminar para dar comienzo a las negociaciones sobre la integración, en una rueda de prensa conjunta en Tokio, en una mesa en la que Nissan será la parte débil ante los pobres resultados de los últimos meses. Además, Honda reveló un plan para recomprar hasta 1,1 billones de yenes (unos 7.000 millones de dólares) en acciones propias. La nueva sociedad de cartera, que albergará la futura unión, tiene como objetivo el cierre de la fusión en junio de 2025 y comenzar a cotizar a lo largo del verano de 2026 en el mercado de capitales de Tokio.
De llegar a buen término, esta integración marcaría la mayor reestructuración en la industria de la automoción a nivel global desde que Fiat Chrysler Automobiles y PSA se fusionaron en 2021, dando lugar a Stellantis, en un acuerdo valorado por aquel entonces en más de 52.000 millones de dólares (49.913 millones de euros).
Asimismo, Mitsubishi, que cuenta con una participación del 24,5% en Nissan, también ha firmado el memorando de entendimiento y formará parte del nuevo conglomerado. Con sus actuales capitalizaciones bursátiles, la combinación podría alcanzar un valor de 54.000 millones de dólares, o 58.000 millones si se incluyera a Mitsubishi. Este movimiento podría redefinir el panorama automotriz en un momento de transformación industrial. Renault sigue de cerca los contactos entre Nissan, del que es el principal accionista y manifestó que «estudiaremos todas las opciones posibles en el mejor interés del grupo Renault y de sus diferentes socios». La marca del rombo posee el 35,71 % de las acciones de Nissan, lo que le convierte en un interlocutor de talla en las negociaciones para la fusión con Honda. Pero en la última renegociación de la alianza Renault-Nissan, el año pasado, el grupo francés conservó solo el 15 % de los derechos de voto de Nissan, lo que limita su papel.
Esta alianza podría catapultar a la nueva entidad al podio como el tercer mayor fabricante de automóviles a nivel mundial, posicionándose en una competencia directa con titanes como Toyota. en el mercado japonés y con fabricantes chinos como BYD y Geely Automobile en el ámbito internacional. Toyota, que ya cuenta con participaciones en Subaru, Suzuki y Mazda, ha consolidado un ecosistema robusto de marcas, respaldado por su sólida calificación crediticia. Esta estrategia le permite mantener una ventaja competitiva significativa en un sector cada vez más desafiante.
Las tres principales automotrices japonesas enfrentan una amenaza existencial en un contexto de rápida transformación hacia los vehículos eléctricos y los sistemas híbridos, dejando atrás los motores de combustión tradicionales. Este cambio ha generado un desafío significativo en sus modelos de negocio.
En China, la creciente popularidad de los autos eléctricos nacionales ha exacerbado la lucha de las marcas extranjeras por mantenerse relevantes, dejando a los fabricantes japoneses atrapados en un exceso de capacidad. Tanto Honda como Nissan han tenido que implementar recortes de personal y producción, mientras que Mitsubishi Motors Corp. ha prácticamente abandonado el mercado chino, el más grande del mundo. Por otro lado, en Norteamérica, el aumento de la demanda de coches híbridos ha puesto a Nissan en una posición vulnerable. A diferencia de Toyota, que lidera en tecnología híbrida y ha visto un aumento en sus ventas, ha perdido cuota de mercado debido a su oferta desactualizada, sin opciones atractivas en híbridos ni en eléctricos competitivos.
Para Nissan, integrarse con Honda podría representar un alivio crucial tras las decepcionantes ventas en las dos mayores economías del mundo, que han provocado una drástica caída en sus ingresos. Este desplome ha obligado al fabricante a implementar recortes de personal, reducir su capacidad de producción y ajustar a la baja su proyección de ganancias anuales en un 70%. Así pues, esta alianza no solo podría brindar una oportunidad para revitalizar su oferta de productos, sino que también le permitiría beneficiarse de sinergias que fortalezcan su posición en mercados en crisis.
Las acciones de estos fabricantes que cotizan en la Bolsa de Valores de Tokio cerraron la sesión del lunes con subidas superiores al 3% –hasta los 1.276 yenes (7,82 euros por título)– para Honda y del 1,5% en el caso de Nissan, hasta los 450 yenes (2,76 euros por acción) tras anunciar el inicio de las negociaciones.