La realidad detrás del bacalao en las cenas navideñas en México – SéUnoNoticias
Con la llegada de la Navidad, el bacalao a la vizcaína se posiciona como uno de los platillos más tradicionales en las mesas mexicanas. Sin embargo, una investigación de Oceana, organización dedicada a la conservación marina, revela que gran parte del “bacalao” que se comercializa en México podría no ser lo que parece. Según la organización, tres de cada 10 veces que se compra bacalao, en realidad se adquieren otras especies marinas, como rayas, mantarrayas o tiburones, muchas de las cuales están en peligro de extinción.
Sustitución del bacalao: un problema creciente
El bacalao noruego, el más utilizado para preparar el platillo a la vizcaína, es un producto de importación. Sin embargo, en pescaderías y restaurantes en México, especialmente en la Ciudad de México, se han registrado tasas de sustitución del 55% y 40% respectivamente, según datos proporcionados por Esteban García-Peña Valenzuela, coordinador de Investigaciones y Política Pública de Oceana.
Esta práctica también se observa en otras regiones del país, como Yucatán, donde los índices de sustitución son similares. Esto se debe, en parte, a la falta de regulación efectiva en la comercialización de productos pesqueros.
Especies sustitutas y su impacto ambiental
Entre las especies que suelen sustituir al bacalao se encuentran rayas, mantarrayas y tiburones, como el tiburón martillo, el tiburón toro y el tiburón zorro. Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), estas especies están catalogadas como “casi amenazadas” o en peligro de extinción.
El consumo no regulado de estas especies no solo engaña a los consumidores, sino que también contribuye a la sobreexplotación y al deterioro de los ecosistemas marinos.
Regulación estancada: NOM 038
Una de las principales herramientas para combatir este problema sería la implementación de la NOM 038, una norma que establece mecanismos para la trazabilidad de productos pesqueros, desde su captura hasta su comercialización. Sin embargo, según Oceana, esta regulación ha estado congelada en la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) durante los últimos cuatro años.
García-Peña urgió a las autoridades a hacer efectiva esta normativa para garantizar que los consumidores tengan acceso a productos auténticos y sostenibles.
Cómo identificar bacalao auténtico
Ante esta situación, es crucial que los consumidores tomen medidas para evitar ser engañados:
- Comprar en lugares confiables: Preferir establecimientos con buena reputación y certificados.
- Revisar el etiquetado: Verificar que se mencione la especie y su procedencia.
- Cuestionar al vendedor: Preguntar sobre el origen y tipo de pescado.
Un llamado a la responsabilidad
Este problema pone de manifiesto la importancia de garantizar prácticas de consumo responsable y de fortalecer la regulación de productos pesqueros. Al elegir bacalao auténtico y sostenible, no solo se preserva una tradición navideña, sino que también se protege la biodiversidad marina.