CEDA alberga “Alimento para todos”, opción de comida para trabajadores | La Silla Rota
Las épocas decembrinas están caracterizadas por compartir y comer en familia, esta es la misión del banco de alimentos “Alimento para todos” que con base en donaciones de supermercados y empresas surte a más de 125 mil familias a la semana, con despensas de 30 kilos por las que pagan máximo 300 pesos, además de que a diario alimenta, en su comedor comunitario, a más de 160 diableros de la Central de Abastos (CEDA), quienes pagan por una comida completa 16 pesos.
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El comedor comunitario que nutre a los trabajadores que cargan diariamente toneladas de fruta y verdura en sus “diablos”, está ubicado en un local del pasillo 2 de la nave UW de la Central de Abastos. Es inconfundible el estacionamiento de “diablitos” en su entrada, además de que se trata de un local único: limpio y bien alumbrado de todo el pasillo.
Con lo mismo que cuesta una bolsa de papas fritas, los diableros pueden disfrutar de una comida completa; 16 pesos les asegura nutrirse de tortillas, frijoles refritos, arroz, verduras cocidas, guisado, postre y toda el agua que quieran.
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Por Navidad la cocinera del comedor comunitario, Magos, preparó todo el mes de diciembre platillos de la época como lomo, pierna, pollo y carne enchilada, romeritos y ensalada de manzana; se adelantó porque “muchos de los clientes no vienen hasta el próximo año y no quería que se lo perdieran”.
“Les avisé que antes les iba a preparar que su pollo a la piña, la ensalada de manzana y el lomo… muchos no vienen hasta el próximo año y no quería que otros comieran lo mismo aquí que en sus casas” dijo Magos en entrevista con La Silla Rota.
Muchos diableros aseguran que no volverían a comer en otro lugar que no fuera el comedor comunitario que, de 8 de la mañana a 1 de la tarde, es un espacio tranquilo y limpio en el que pueden descansar y nutrirse.
“Aquí hay higiene, atención, calidad, amabilidad… allá donde trabajo no, está bien sucio, muy antihigiénico. Pagar 16 pesos para mí está regalado, en otros lados está más caro. Comer aquí en la Central no conviene, es insalubre” así lo expresó Miguel Ángel, diablero.
¿Cómo se sostiene el comedor comunitario?
Anabel, representante de “Alimento para todos”, afirmó a La Silla Rota que aún cuando el comedor comunitario es un proyecto que ha cambiado el estilo de vida de los diableros de la Central de Abastos, no es rentable.
“Este proyecto es lo más cerca que estamos del beneficiario, nos encanta, pero sí estamos en números rojos, nos sirven mucho las donaciones”.
Farmacias y otras empresas de supermercados ayudan con el financiamiento de las comidas, que más allá de alimentar a los diableros y más trabajadores de la Central de Abastos, cambia sus hábitos y mejora su relación con la comida.
Higiene y hábitos: los objetivos del comedor comunitario
Lo más valioso para Anabel y la empresa “Alimentos para todos” es que los diableros tienen la oportunidad de mejorar su alimentación, mejorar sus hábitos alimenticios y darles una dignidad al nutrirse.
Anabel contó a La Silla Rota que el mayor problema del comedor, desde su apertura en mayo de 2023, fue incentivar que los trabajadores de la Central lavaran sus manos antes de comer.
“Nos peleábamos para que se lavaran sus manos y cuando sí se las lavaban, se las secaban en el mandil. Tuvimos que enseñarles a valorar la limpieza y con ella la dignidad al comer. Con el tiempo ha funcionado” comentó Anabel.
Funcionó tanto que los mismos diableros cuentan que ya no comerían en otro lugar que no fuera en “Alimento para todos”.
¿Cómo funciona?
Así como el comedor comunitario, el banco “Alimento para todos” trabaja y surte de despensas a más de 125 mil familias de comunidades necesitadas del Oriente de la CDMX y del Estado de México.
La mayor parte de sus entradas de productos para despensas vienen de donaciones de tiendas de autoservicio, que mandan sus productos abollados, cercanos a la fecha de caducidad o con algún defecto de fábrica o por el tránsito, pero que aún sirven su propósito.
“Alimento para todos” se encarga de ir por los productos con sus propios camiones y logística para almacenarlos en sus bodegas de la calle Tamemes, cerca de la Central de Abastos, y de ahí repartirlos a las comunidades necesitadas.
Debido a que el almacenaje de productos y demás etapas del proceso de recolección requiere de una flotilla de camiones y de personal logística, las despensas tienen un costo que no debe superar el 10% de cada producto, lo que significa de un promedio de 300 pesos por despensa.
Los productos en los almacenes de “Alimento para todos” tienen una vida útil de en promedio 72 horas, por lo que movilizarse rápido para su consumo y aprovechamiento es crucial.
¿Qué incluye la despensa y cómo se consigue?
Cada despensa consta de 30 kilos de producto, dependiendo de lo que hayan enviado las empresas es lo que se da a las comunidades, pero siempre incluyen arroz, frijoles y 1 kilo de tortillas.
Las comunidades atendidas por las despensas de “Alimento para todos” se organizan para conseguir sus propios camiones donde cargan un cierto número de despensas, se entrega una nota a crédito y pagan por la cantidad de productos que repartieron en su comunidad.
Con la entrega del pago de la despensa es como las comunidades pueden seguir participando para ser beneficiarias de todos los productos que, de no ser por el banco de alimentos, las empresas descartarían como basura.
Aquí no se desperdicia nada
“Alimento para todos” es uno de los 50 bancos de alimentos que hay en México, entre todos ellos rescatan solo el 2% de toda la comida que se produce y está destinada al descarte, el resto se tira.
Para aprovechar al máximo todo lo que les donan, “Alimento para todos” tiene una división de voluntarios que recupera la fruta en “estado máximo de maduración” para hacerla mermelada, pan duro para pan molido y leche para hacer queso panela, yogurt y requesón.
También elaboran totopos horneados y tortillas frescas todos los días, que incluyen en los 30 kilogramos de despensa que se otorga a cada familia de 5 integrantes.
¿Cómo puedo donar a “Alimento para todos”?
Tanto el comedor como el banco de alimentos de “Alimentos para todos” basa sus operaciones en las donaciones de alimento y de dinero.
Si se va a donar ropa, comida, elementos de higiene, pañales o toallas sanitarias, la empresa puede pasar por ello en un camión; se puede solicitar en su página web.
Mediante la página también se pueden hacer donaciones económicas que ayudan a la compra de arroz y frijoles, dos granos que no se donan mucho y de los que normalmente no hay merma, por lo que la asociación acciona para conseguirlo.