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Crisis en el abastecimiento de combustible: Agro y minería exigen suministro de diésel
La escasez de diésel en Bolivia ha encendido las alarmas en dos sectores estratégicos de la economía: el agro y la minería. Tanto productores agrícolas como mineros han manifestado su preocupación por la falta de combustible, esencial para mantener activas sus operaciones y garantizar la continuidad de la producción.
El presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo), Fernando Romero, ha hecho un llamado contundente al Gobierno para “inundar de diésel al área rural”. Según Romero, para encarar la cosecha de granos —especialmente de soya, sorgo y maíz— se requieren entre 20 y 26 millones de litros de combustible.
El dirigente destacó que la escasez de diésel no solo afecta las labores de cosecha, sino también el transporte de la producción y la preparación de los suelos para el ciclo de invierno. Las largas filas en las estaciones de servicio en provincias son un claro reflejo del problema, poniendo en riesgo lo que podría ser la recuperación de la producción luego de una baja registrada en 2024.
Sector minero alista movilización
Por otro lado, la Federación de Cooperativas Mineras Auríferas del Norte de La Paz (Fecoman) ha declarado emergencia en su sector, debido a la no recepción de los cupos de diésel comprometidos por las autoridades.
El presidente de Fecoman, Efraín Silva, indicó que desde hace una o dos semanas los mineros no han recibido las dotaciones diarias de combustible, establecidas en cuatro cisternas, lo que ha paralizado sus operaciones.
Silva afirmó que, ante la carencia de combustible, el sector minero se encuentra preparado para salir a las calles y demandar el abastecimiento necesario.
Además, denunció que algunos funcionarios están impidiendo la entrega del diésel, y aunque los mineros están dispuestos a comprar combustible, se enfrentan a problemas de distribución y a la falta de dólares para optar por importaciones directas.
En tanto, El presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, admitió que hubo algunos problemas con la logística en la importación de diésel, debido a diferentes factores como el bloqueo de caminos en Yacuiba y en Yapacaní.
“En la logística es lo que más estamos trabajando para evitar tener estos problemas, porque sabemos que importar el 85% del diésel es bastante, o sea, necesitamos que a veces algunas plantas en Paraguay y Argentina, cuando tenemos algún problema, nos permitan despachar 100% y tenemos que entender que muchas de estas plantas en Paraguay, en Argentina y en Chile, excepto la nuestra en Arica, tienen que despachar a sus mercados internos, a otros clientes y a Bolivia”, explicó el titular de la estatal petrolera.