El botón que siempre debes pulsar en el cajero automático para evitar ser víctima de estafa
Los cajeros automáticos se han convertido en una herramienta indispensable para realizar transacciones bancarias rápidas y seguras. Sin embargo, también representan un punto vulnerable para los delincuentes, quienes buscan aprovechar cualquier descuido para robar información financiera. La seguridad al utilizar estos dispositivos es fundamental, y hay un pequeño pero crucial detalle que puede marcar la diferencia entre una transacción segura y el riesgo de ser víctima de un fraude: presionar un botón concreto antes de retirarse.
¿Qué botón debes apretar en el cajero automático?
Cada vez que se utiliza un cajero automático para realizar una operación, como retirar efectivo o consultar el saldo, existe la posibilidad de que la sesión permanezca abierta por unos segundos después de finalizar la transacción. Esto significa que, si el usuario se retira sin cerrar completamente su sesión, una persona malintencionada podría aprovechar ese breve lapso para obtener información sensible.
Presionar el botón de ‘Cancelar’ antes de retirarse del cajero automático asegura que la sesión se cierre por completo y que no quede ningún dato expuesto en la pantalla. Esta sencilla acción puede marcar la diferencia entre mantener segura una cuenta bancaria o caer en una trampa que comprometa los fondos personales.
Otras recomendaciones para evitar fraudes en cajeros automáticos
Además de presionar ‘Cancelar’, hay otras medidas de seguridad que se pueden aplicar para minimizar riesgos al usar un cajero automático:
1. Verificar el estado del cajero antes de usarlo: Algunos delincuentes instalan dispositivos como skimmers, que copian la información de las tarjetas. Si el lector de tarjetas o el teclado parecen alterados o fuera de lo común, es mejor buscar otro cajero.
2. Cubrir el teclado al ingresar el PIN: Aunque pueda parecer una medida básica, muchos fraudes ocurren porque alguien observa cómo se digita la clave. Usar la otra mano para cubrir el teclado evita que cámaras ocultas o miradas indiscretas registren el código.
3. No aceptar ayuda de extraños: Si un desconocido se ofrece a ayudar bajo cualquier pretexto, lo mejor es rechazarlo amablemente. Algunos estafadores utilizan esta estrategia para distraer y obtener información confidencial, especialmente ante personas vulnerables.
4. Evitar retirar dinero en lugares solitarios o de noche: Siempre es recomendable usar cajeros en zonas iluminadas y con presencia de otras personas. De esta manera, se reduce el riesgo de ser víctima de un asalto.
5. Revisar periódicamente los movimientos bancarios: Estar atento a cualquier transacción sospechosa permite detectar fraudes a tiempo y reportarlos al banco para tomar medidas correctivas.
Proteger la información financiera no requiere de grandes conocimientos en seguridad. Acciones tan sencillas como pulsar el botón de ‘Cancelar’ pueden evitar que datos sensibles queden expuestos y, por lo tanto, reducir el riesgo de ser víctima de fraude. En un mundo donde los delincuentes buscan constantemente nuevas formas de engañar, estar alerta y seguir buenas prácticas de seguridad es la mejor defensa.
