
Una cucharada de promesas: el ritual viral que seduce a TikTok (y por qué deberías pensarlo dos veces)
Cada tanto, las redes sociales descubren un nuevo “ritual” para transformar nuestra salud con mínimo esfuerzo. Esta vez, el protagonista es el aceite de coco. Con millones de visualizaciones y promesas tentadoras, la cucharada matinal se ha convertido en tendencia global. Pero detrás del entusiasmo, se esconden dudas, exageraciones y verdades a medias que conviene conocer antes de seguir la corriente.
El ritual de moda: una cucharada al despertar
TikTok se ha convertido en la cuna de múltiples rituales de bienestar, pero pocos han alcanzado tanta repercusión como el de tomar aceite de coco en ayunas. Los vídeos bajo hashtags como #coconutoilinthemorning muestran cuerpos delgados, piel brillante y frases como “tengo más energía” o “es mi secreto para adelgazar”. Todo apunta a una fórmula mágica que promete salud sin esfuerzo.
Esta tendencia no surge de la nada. Es la heredera de modas anteriores como el agua con limón o el ayuno intermitente. Cambian los productos, pero el mensaje es el mismo: adelgazar rápido, sin cuestionar nada. Mientras tanto, en España crecen las enfermedades digestivas, y el culto al cuerpo normativo domina el algoritmo. ¿Casualidad? Difícil.
Lo que la ciencia realmente dice sobre el aceite de coco
Lejos del hype, el aceite de coco es una grasa saturada con propiedades específicas. Algunos estudios sugieren beneficios puntuales: puede elevar el colesterol “bueno” (HDL) y tener efectos antimicrobianos gracias al ácido láurico. También se ha estudiado como posible apoyo frente a ciertos hongos.
Sin embargo, nutricionistas como Sandra Moñino advierten que no se trata de un alimento milagroso. Puede ser útil en ciertos contextos, pero su consumo indiscriminado puede traer efectos secundarios. La también experta Emma G. ha señalado que muchas personas han sufrido molestias digestivas al introducirlo en ayunas. “No existe un alimento que adelgace por sí solo”, sentencia.

Más allá de la cucharada: otros usos del aceite de coco
En el universo del wellness, el aceite de coco tiene múltiples vidas. Se ha popularizado el oil pulling, una práctica hindú que consiste en enjuagar la boca con aceite para mejorar la salud bucal. Aunque podría reducir bacterias, no sustituye el cepillado ni tiene beneficios probados universales.
También se utiliza como lubricante íntimo o hidratante vaginal. Aunque puede aliviar la sequedad, puede debilitar preservativos y alterar el pH. Y en cosmética, se aplica en cabello, piel y labios. Pero no todas las pieles lo toleran bien: puede obstruir poros y agravar el acné.
Una tendencia que dice más de nosotros que del aceite
Convertir una cucharada de aceite de coco en un ritual global es parte del problema. Se toma una experiencia individual y se convierte en receta universal, sin contexto ni evidencia suficiente. Esta narrativa encaja perfectamente con el discurso estético dominante en redes sociales, donde la delgadez se disfraza de salud.
Al final, lo que verdaderamente construye salud no son los atajos virales, sino hábitos sostenibles, decisiones informadas y una visión crítica de lo que nos venden como bienestar. Porque una cucharada puede tener efectos… pero no los que crees.
Fuente: Xataka.