
Prioridades del PE para el presupuesto a largo plazo de la UE más allá de 2027
En el texto, aprobado por 317 votos a favor, 206 en contra y 123 abstenciones, los eurodiputados piden un marco financiero plurianual (MFP) significativamente más ambicioso que permita responder a las crecientes expectativas de la ciudadanía de la UE en un contexto de inestabilidad mundial. El actual límite máximo de gasto del 1 % de la renta nacional bruta de la EU-27 no es suficiente para hacer frente al creciente número de crisis y retos, afirman los eurodiputados. Con la retirada de los Estados Unidos de su papel mundial, el gasto tendrá que abordar la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, un contexto económico y social muy difícil, la brecha de competitividad y el empeoramiento de la crisis climática y de biodiversidad, añaden.
No a planes nacionales únicos
El Parlamento rechaza la idea de la Comisión de reproducir el modelo de «un plan nacional por Estado miembro» del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia. En su lugar, los eurodiputados piden una estructura que garantice la transparencia y la rendición de cuentas parlamentaria, e implique a las autoridades regionales y locales y a todos los agentes pertinentes. La resolución también reafirma el papel de la política de cohesión para consolidar el mercado único y avanzar en la reducción de la desigualdad y la lucha contra la pobreza.
Competitividad y defensa
Los eurodiputados consideran que el «fondo de competitividad» propuesto, que fusionaría varios programas existentes, es inadecuado. En su lugar, piden un nuevo fondo específico diseñado para impulsar las inversiones privadas y públicas a través de mecanismos de reducción de riesgos respaldados por la UE. El aumento del gasto en defensa es necesario, dicen, pero esto no debe socavar el gasto social y ambiental o las políticas consolidadas.
Simplificación, flexibilidad y Estado de Derecho
El próximo presupuesto a largo plazo debe apostar la reducción de la burocracia innecesaria para los beneficiarios, pero no debe dar a la Comisión más margen de maniobra sin el control democrático del Parlamento. Un presupuesto más simple debe ser un presupuesto más transparente, recalcan los eurodiputados.
La flexibilidad en el gasto también es clave: la capacidad de respuesta a las crisis debe integrarse en el presupuesto para cada ámbito político, manteniendo la ayuda humanitaria protegida. El próximo presupuesto debería incluir dos instrumentos especiales: uno para operaciones de asistencia en casos de desastre y otro para otros retos imprevistos. Los eurodiputados insisten en que el acceso a los fondos debe estar vinculado al respeto de los valores de la UE y del Estado de Derecho, y abogan por un mecanismo de condicionalidad inteligente para evitar penalizar a los beneficiarios por las acciones de sus gobiernos.
Reembolso de la deuda y préstamos conjunto
Los eurodiputados insisten en que el reembolso de los costes de endeudamiento de NextGenerationEU no debe poner en peligro la financiación de las prioridades clave de la UE. Piden una clara separación entre el reembolso de la deuda y el gasto de los programas, e instan al Consejo a que adopte nuevas fuentes de ingresos. El empréstito conjunto se considera una herramienta viable para hacer frente a las crisis a escala de la UE, como la seguridad y la defensa.
Declaraciones de los coponentes
«Queremos que el próximo presupuesto de la UE a largo plazo esté mejor equipado para responder a los retos actuales, ayudando a Europa a actuar rápidamente en situaciones de crisis, proteger mejor a sus ciudadanos y construir una Unión más fuerte y competitiva. También queremos un apoyo adecuado a nuestras prioridades, como la agricultura y la cohesión. Proponemos un aumento responsable y justificado en el próximo MFP, más allá del anticuado límite del 1 % de la RNB. Si pedimos a la UE que haga más, debemos equiparla en consecuencia. El Parlamento Europeo solo aprobará un MFP preparado para el futuro que sea flexible, eficaz y esté listo para su aplicación a más tardar el 1 de enero de 2028. Por este motivo, instamos al Consejo y a la Comisión a que inicien las negociaciones inmediatamente después de la presentación de la propuesta de la Comisión en julio», afirmó Siegfried Mureşan (PPE, Rumanía).
«Las personas y las regiones deben ocupar un lugar central en el próximo MFP y debemos garantizar que la UE esté preparada para responder a las necesidades de su ciudadanía. Necesitamos inversiones sólidas para impulsar la autonomía estratégica, la resiliencia económica y los objetivos ecológicos sin dejar a nadie atrás. Además, un presupuesto ambicioso debe promover la cohesión social y territorial, incluir fuentes de ingresos nuevas y modernizadas y garantizar una financiación suficiente para la seguridad, la defensa y la preparación para garantizar sociedades justas y prósperas, al tiempo que se defienden el Estado de Derecho y los valores fundamentales de la UE», ha declarado Carla Tavares (S&D, Portugal).
Próximos pasos
Las prioridades del Parlamento están diseñadas para contribuir a la propuesta de la Comisión sobre el próximo presupuesto a largo plazo de la UE, que se publicará en julio de 2025.
Antecedentes
El marco financiero plurianual (MFP) se establece para un período de siete años y establece los límites máximos de gasto para diferentes ámbitos políticos. Tras haber obtenido la aprobación del Parlamento, concedida por mayoría de los miembros que lo componen, los Gobiernos de la UE adoptan el Reglamento MFP por unanimidad. El actual presupuesto a largo plazo de la UE se agota el 31 de diciembre de 2027.