
El deslumbrante edificio Estel de Barcelona se inaugura con el 65% de oficinas y locales contratados
Aspira a ser el edificio de oficinas al que todo trabajador querría acudir. Un espacio «experiencial» capaz de combatir la tendencia del teletrabajo, ofreciendo todos los servicios posibles para atraer (y retener) «talento joven». El edificio Estel, conocido por haber sido la histórica sede de Telefónica en el Eixample y haber caído varios años en el abandono, ha resucitado convertido en una construcción icónica que ha deslumbrado en su inauguración oficial este jueves. Tras 24 meses de obras, el proyecto promovido por las firmas de inversión Bain Capital y FREO Group está listo para ser ocupado. No obstante, su principal inquilino, la farmacéutica AstraZeneca, no completará su entrada hasta finales de año, cuando haya adecuado las ocho plantas contratadas. Junto a varios operadores comerciales confirmados en planta baja, suman ya un 65% del espacio contratado. Varios locales y espacios de oficina están en fase de negociación con la previsión de plena ocupación a principios de 2026.
Una de las zonas de terraza, en la planta 14. / Victoria Rovira
Por la tarde, se ha vivido la presentación en sociedad con una fiesta y un espectáculo de acrobacia, que ha contado con el alcalde Jaume Collboni, el conseller de Presidència, Albert Dalmau, y CEO y altos cargos de las empresas promotoras y comercializadoras. Collboni ha pedido «perdón» al vecindario por los 15 años de indefinición que vivió el inmueble, y ha alabado su recuperación como un símbolo de futuro. También ha destacado la dinamización de la zona, con la futura nueva estación de Sants y el proyecto del eje de la antigua cárcel Modelo, que impulsan una «mejor ciudad».
La recuperación de la manzana que abarca el bloque Estel en la Nova Esquerra del Eixample es estratégica para el barrio, que sufrió la degradación del edificio de Telefónica, cuando la empresa se mudó y diversos proyectos se estrellaron sucesivamente. Finalmente, ha rememorado Daniel Mayans, director general de FREO Group, de la mano de Bain Capital dieron un giro total al guion al apostar por oficinas de ultimísima generación, completadas con locales comerciales a pie de calle. En total, 50.000 metros cuadrados alquilables –los comercializan CBRE y Savills– en una ubicación «atractiva» por su proximidad a la estación de Sants, la Diagonal y a todo tipo de comercios y servicios, y por su buena conectividad. Este nuevo centro de actividad económica contará con entre 4.000 y un máximo de 5.000 trabajadores. Y la guinda al pastel llegará con la anunciada reurbanización por parte del ayuntamiento del tramo pendiente de la avenida de Roma, que ubica una gran plaza de 8.000 m2 justo en frente del Estel.
Luz natural por todos los costados
Los promotores partían de una construcción de los años 70 del arquitecto Francesc Mitjans, cuya estructura se ha aprovechado, en un rediseño firmado por Albert Blanch (BCA Arquitectura) que ha priorizado la rehabilitación frente a la demolición, como ejercicio de sostenibilidad. A primera vista, desde la avenida de Roma, impresionan las 13 plantas acristaladas del cuerpo principal coronadas por una enorme terraza panorámica ajardinada. Pero el diseño tiene coherencia en el resto de relucientes fachadas (la que da a Mallorca es un bloque de 8 plantas), para integrar el conjunto en el barrio.

Patio interior del Edificio Estel de Barcelona. / Victoria Rovira
Y sobre todo sorprende con un patio interior que garantiza la luz natural indirecta a las oficinas de esa parte y además rinde memoria a la anterior etapa con las antiguas columnas de hormigón integradas. Ese oasis será lugar de relajación, charlas informales, para comer o para el uso que se desee, ha detallado Gerard Beltri, Asset Manager (gestión de activos) de FREO. Lo más llamativo del patio es su silencio sepulcral, pese a estar en pleno Eixample.
Mayans no ha querido precisar cifras económicas, pero ha dicho que no se han desviado apenas del presupuesto de partida. En aquel momento se habló de unos 80 millones de euros para la rehabilitación, que se sumaban a los 120 millones que habían pagado por el activo. El resultado ha obtenido las más importantes certificaciones energéticas.

Espacios comunes del Edificio Estel de Barcelona. / Victoria Rovira
El edificio está listo para cualquier desembarco, pero el calendario dependerá de las obras que quiera hacer cada operador para habilitar los espacios. En el caso de AstraZeneca, la previsión es que su Global Hub se instale al completo en el último trimestre del año, más bien hacia final de año. Finalmente, lo hará simultáneamente con su filial Alexion. Ocupan las plantas entre la 6ª y 13ª, donde estiman que se instalarán 2.000 trabajadores, de perfil tanto local como internacional. Fuentes de la farmacéutica han detallado este jueves que aglutinará a los 1.300 empleados que tiene ahora repartidos en distintas oficinas en la ciudad, a los que se añadirán nuevos puestos. Todo su espacio será de oficinas para sus distintas divisiones médicas (sin laboratorios), programación, estadistas, desarrollo tecnológico y demás.
En visita guiada por la edificación, Beltri ha explicado esta mañana que otras empresas de los sectores tecnológicos, de investigación e innovación están negociando su posible entrada en Estel. Están disponibles las plantas de mayor tamaño, de la 2ª a la 5ª, de más de 5.300 metros cuadrados diáfanos, que se pueden adaptar a las necesidades de espacio de cada empresa. De la 1ª se oferta solo una parte, ya que la mitad se va a dedicar a un ‘business center’ modulable, para que las empresas tengan áreas de reuniones sin necesidad de hipotecar sus espacios de trabajo privados, en el lado que da a Calàbria con Roma. Otra parte de esta planta será del gimnasio Planet Fitness, que ha contratado 1.700 m2 en tres niveles que abarcan también una parte de la -1 y la planta de calle en la parte de Calàbria-Mallorca, abierto al barrio.
Interacción entre empresas
Con el mantra de que trabajar en el edificio sea una «experiencia en sí», ha explicado Mayans, se ha garantizado que el edificio aglutine todo tipo de servicios. Que seduzca a los trabajadores y además favorezca la interacción entre empresas de la mano de sus modernísimos espacios comunes. Lo ha calificado como «único» por emplazamiento, prestaciones y sostenibilidad.

Zonas comunes del edificio Estel de Barcelona / VICTORIA ROVIRA
Aunque está claro que los miles de usuarios tendrán también impacto económico en el entorno, en la planta baja habrá opciones de restauración para ellos y para el barrio en general. Esta ocupa 3.000 metros cuadrados y aloja un gran hall y distintos locales. Desde hace meses están confirmadas las marcas de Casa Carmen (acceso por avenida Roma) y Honest Greeens (de 400 m2), que abrirán posiblemente en otoño. Se está ultimando también la contratación de un supermercado ecológico y con platos preparados para los 150 metros cuadrados ubicados en Mallorca con Viladomat, y de otro restaurante de las mismas dimensiones en el lateral de Calàbria. Quedarán solo libres un gran local de 350 metros cuadrados en Viladomat con Roma, y otro pequeño de 30 metros cuadrados.
Mención aparte merece la planta -1, que cuenta con un amplio gimnasio equipado solo para los trabajadores del edificio, con zona de yoga y relajación. También auditorio y zona de comedor. Por debajo se emplaza el párking, de la -2 a la -5. Un abanico de facilidades aún poco común en la mayoría de oficinas de la ciudad.