
Museo neoyorquino exhibe las Cartas de amor de Vermeer
▲ Vermeer dedicó seis de sus obras a la lectura, escritura o intercambio de cartas, entre ellas, la obra Señora y criada, última pintura que adquirió en 1919 el magnate industrial y mecenas Henry Clay Frick, y Mujer escribiendo una carta con su criada, que el museo pidió prestadas a la Galería Nacional de Irlanda de Dublín. La muestra es la primera que se realiza desde la reapertura del recinto, tras cinco años de permanecer cerrado por remodelación.Foto cortesía de la Frick Collection
Afp
Periódico La Jornada
Domingo 22 de junio de 2025, p. 3
Nueva York. ¿Una exposición con apenas tres obras? Esa es la propuesta de la Frick Collection de Nueva York con las Cartas de amor de Vermeer, muestra de tres lienzos del célebre pintor holandés del siglo XVII, donde señoras y criadas son cómplices de aparentes tramas de amores secretos.
Johannes Vermeer (1632-1675), destacado exponente del Siglo de Oro neerlandés y pintor de La joven de la perla, dedicó seis de sus obras a la lectura, a la escritura o al intercambio de cartas, en un tiempo en que la comunicación epistolar vivía su apogeo en el arte.
En tres de ellas aparecen mujeres leyendo o escribiendo cartas en solitario.
Pero en las tres pinturas que estarán expuestas en Nueva York hasta finales de agosto aparece otro personaje: la criada, convertida en intermediaria
de la señora, que, presumiblemente, mantiene una aventura o algún tipo de relación amorosa
con el autor de las misivas, sostiene el curador Robert Fucci.
En una época en que las mujeres gozaban cada vez más de autonomía para elegir a sus parejas sentimentales, las criadas eran sin duda testigos de cierta emoción en ese proceso
, explica este especialista de la pintura holandesa del siglo XVII.
La muestra de la Frick Collection incluye la obra Señora y criada, última pintura que adquirió en 1919 el magnate industrial y mecenas Henry Clay Frick, y dos que el museo pidió prestadas a la Galería Nacional de Irlanda de Dublín y al Rijksmuseum de Ámsterdam: Mujer escribiendo una carta con su criada y La carta de amor.
Para Fucci, los espectadores pueden fácilmente identificarse con esa sensación de anticipación, esa expectativa
del momento retratado que Vermeer utiliza como punto focal central en estas imágenes para explorar realmente lo que está en juego
.
Enigmáticas
Aunque difieren en escala, acción y perspectiva, según los curadores las tres obras crean narrativas enigmáticas
, un sello distintivo de Vermeer, quien solía pintar la vida cotidiana ambientada en espacios domésticos llenos de luz.
Dos de las pinturas (La carta de amor y Mujer escribiendo una carta con su criada) parecen haber sido importantes para la esposa del pintor, Catharina Bolnes, quien quedó viuda con 11 hijos y las utilizó para saldar una deuda con un panadero local, con la esperanza de poder recuperarlas algún día. Se desconoce si lo logró.
La exhibición de las cartas de amor es la primera exposición de Johannes Vermeer en Nueva York desde 2001, y la primera muestra que realiza el museo de la Frick Collection desde su reapertura, en abril, tras cinco años cerrado por reformas.
El Rijksmuseum organizó hace dos años una gran exposición dedicada al artista holandés, con 28 de las alrededor de 35 pinturas suyas que han sobrevivido.
Pero Nueva York es ahora un excelente destino para los amantes de la obra de Vermeer: a las cinco pinturas suyas que expone en este momento la Frick Collection, ubicada en Manhattan, se suman otras cinco que posee el vecino Museo Metropolitano de Arte (Met), recuerda la curadora de la Frick Collection Aimée Ng.
¡Casi un tercio!
de sus pinturas, exclama.
Sin duda, Vermeer sigue cautivando e inspirando a la gente hoy día.