
Brasileña JBS compra planta en EU para evitar arancel de 50% – El Economista
JBS, el mayor procesador de carne del mundo, anunció este jueves que comprará una planta de producción de alimentos en Ankeny, estado de Iowa, por 100 millones, con lo que se dispondría a tener su mayor fábrica de tocino y salchichas listas para consumo en Estados Unidos.
En un comunicado enviado al mercado, la multinacional señaló que la planta ampliada y modernizada estará operativa a mediados de 2026, una vez finalizadas las inversiones iniciales de capital y su construcción.
“Este anuncio refuerza nuestra estrategia de ofrecer productos de valor agregado para satisfacer las necesidades de clientes y consumidores”, afirmó Wesley Batista Filho, director general de JBS USA.
La noticia se dio a conocer justo antes de la entrega de resultados trimestrales y semestrales, y en medio de un complejo entorno para la industria cárnica cuando desde el Gobierno de Donald Trump se ha impuesto un arancel del 50% a distintos productos, entre ellos precisamente la carne, que forman parte del 35% de los envíos brasileños a Estados Unidos.
Con esta apuesta, la firma -que representa un 15% de los envíos de carne vacuno a EU- buscará centrar su producción en el país para esquivar los gravámenes. Y es que la compañía ha invertido 835 millones de dólares a inversiones estratégicas en la primera economía global, tanto para la planta de Iowa como para la modernización de las fábricas de carne en Cactus (Texas) y Greeley (Colorado), y para una instalación de alimentos preparados en Walker County, Georgia.
Los resultados
La compañía entregó datos de su desempeño financiero, por primera vez desde que empezó a cotizar en Nueva York en junio.
En el detalle, JBS registró una ganancia neta de 528.1 millones de dólares en el segundo trimestre, lo que supone un aumento anual del 60.6%.
Sin embargo, la empresa registró pérdidas en el segundo trimestre en la operación de carne de res de Norteamérica, que se multiplicaron por 11 respecto al año anterior, alcanzando los 293 millones de dólares. El beneficio ajustado antes de intereses e impuestos disminuyó un 12% respecto al año anterior.
«Vivimos un momento difícil, pero dado el contexto, estamos satisfechos con lo que estamos ofreciendo en términos de márgenes», dijo el CEO, Gilberto Tomazoni, en una entrevista, refiriéndose al margen global de JBS del 8.4% para el trimestre.
La menor cantidad de rebaño de ganado en décadas ha elevado los precios de los animales en peso de sacrificio a un máximo histórico, eliminando miles de millones de dólares en ganancias para los principales productores de carne, incluidos Tyson Foods y Cargill. La crisis de suministro se ha visto agravada por la prohibición de las importaciones de ganado de México debido a las preocupaciones por la propagación de una mosca que se alimenta de alimentos frescos.
También impactó el brote de gripe aviar que afectó al país de origen.
Las acciones de la compañía caen a esta hora un 4 por ciento.