
Rubén Lozano, concejal de Medio Ambiente: «El trasvase no influye tanto en el río Tajo …
—«La proliferación de ratas en el Casco Histórico es porque los vecinos las dan de comer». Esto afirmó hace un mes y medio. ¿Lo mantiene?
—Este verano ha sido muy complicado y no solo en Toledo, también en otras localidades muy próximas. Se han incrementado algunas plagas y otras han descendido. En lo que voy a insistir es en la pedagogía que tenemos que hacer con los vecinos. La implantación de contenedores en el Casco Histórico ha sido muy importantes para evitar la aparición de roedores. Debemos entender que a la hora de sacar la basura y de dejar residuos en la calle hay que ser cautos, pero vivimos en una ciudad en la que estos problemas han existido siempre. Ante estas situaciones nos queda la prevención y respetar el depósito de la basura.
—Apuntaba a un verano complicado, también por las olas de calor cada vez más frecuentes. ¿Qué pasos en dado en materia de arbolado?
—Tenemos una ciudad que térmicamente tiene una variabilidad muy grande. Tenemos inviernos muy fríos y, por ejemplo, el año de Filomena en el arbolado fue muy grave y todavía lo seguimos padeciendo en muchas zonas de la ciudad en las que siguen muriendo árboles. Teníamos también un arbolado muy antiguo y enfermo, muy mal cuidado y mal tratado, pero desde el primer día de la legislatura entendimos que todo eso tenía que cambiar y pusimos en marcha un plan de arbolado para todos los barrios de la ciudad. Le puedo avanzar que 2026 será un año muy importante en cuanto a este tema. Queremos hacer un plan especial que también irá encaminado a reducir la huella de carbono por lo que vamos a involucrar a muchas empresas. Además, apostaremos por ampliar las zonas de sombra como se está haciendo ya en el en el barrio de Santa Teresa.
—¿Maneja la cifra de árboles plantados en estos 2 años?
—Estamos en torno a los 1.800 o 1.900 árboles, pero el impulso que queremos dar en 2026 va a ser muy notorio. Conllevará muchísimo trabajo, pero es una demanda social, una necesidad con las dificultades que conlleva la elección de las especies y de su mantenimiento para una ciudad como Toledo, una ciudad en la que trabajamos para que cada vez sea más verde.
—Es responsable de la Concejalía específica del Tajo, ¿le preocupa la situación del río?
—Sí, lógicamente no solo por ser el concejal del Río Tajo, sino por ser un toledano y un usuario de esas riberas y esas sendas, estoy muy preocupado, podría llegar a decir que estoy enfadado porque no se cumplen los caudales ecológicos. Tenemos que entender que el río es un ente vivo que puede fluctuar desde esas inundaciones que nos regalaron la playa hasta periodos en los que vemos la escasez de agua que a veces nos puede enfadar.
—¿Qué soluciones propone para acabar con esa situación?
—La solución al río en Toledo pasa por cumplir los caudales ecológicos pactados y establecidos por ley que no se están cumpliendo y por la depuración de las aguas. El trasvase no creo que influya tanto en el río a su paso por Toledo. Si se cumplieran los caudales ecológicos tendría un aspecto muy positivo y si se llevasen a cabo los procesos de depuración tendríamos un río en muy buenas condiciones.
—Habla de la depuración de las aguas que se vierten al río Tajo, ¿en qué punto se encuentra el plan municipal de vertido cero al río?
—Pues hemos reducido muy notablemente el número de sanciones que recibía el Ayuntamiento de Toledo por parte de la Confederación Hidrográfica del Tajo por vertidos al río. Esto nos ha hecho ahorrar muchos recursos y sanciones por vertidos que realizaba la ciudad. Puedo afirmar que estamos siendo la punta de lanza en este sentido para que otros muchos municipios también procedan a eliminar sus vertidos al Tajo. En estos dos años ya hemos cerrado nueve puntos de vertido, nueve zonas en la ciudad por donde ser vertían residuos al río. Creo que de aquí al final de la legislatura conseguiremos cerrar todos esos puntos y podremos decir y sentirnos satisfechos de que la ciudad de Toledo no contamina el río Tajo.