
Fomentan desde el arte la defensa por el maíz y la milpa que nos dan identidad
▲ Sobre estas líneas, obra sin título de Alberto Castro Leñero. A la derecha, una pieza, también sin título, de Coral Revueltas, ambas forman parte de la exposición que busca ofrecer una perspectiva única sobre el maíz. La muestra permanecerá abierta al público hasta finales de noviembre.Foto cortesía de los artistas
Fabiola Palapa Quijas
Periódico La Jornada
Sábado 27 de septiembre de 2025, p. 2
El maíz, que más que un cultivo es el corazón de nuestra cultura e identidad, es el tema central de la muestra Maizal gráfico, conformada por la obra de 30 artistas de diferentes estilos y miradas producidas en el taller de grabado del Complejo Cultural Los Pinos (CCLP), que coordina Fernando Gálvez Aguinaga.
La exhibición abrió el jueves pasado en el Centro Cultural Casa Talavera de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM), donde se destacó la relevancia del maíz, base de nuestra economía y esencia de nuestra identidad.
Cada pieza ofrece una perspectiva única sobre el grano, desde leyendas y tradiciones orales hasta críticas y reflexiones sobre la agroindustria y los elementos tóxicos que afectan a la sociedad. Los artistas plasmaron su opinión sobre este alimento, sus riesgos y peligros, como las semillas transgénicas.
Gálvez Aguinaga consideró que el maíz “es mítico para nuestro pueblo; si se encuentra en las religiones precolombinas, en los mitos y leyendas, en las tradiciones orales, rituales y artesanales de hoy día y el pasado, es porque la sistematización de su cultivo permitió el desarrollo de las grandes civilizaciones y la sobrevivencia de las comunidades desde hace por lo menos 10 mil años hasta nuestros días”.
Esta exposición ya se presentó en Oaxaca, Morelos y Veracruz, para promover desde el arte la defensa del producto y el agrosistema que nos dan identidad y sustento en todo México: el maíz, la milpa y la chinampa.
“El proyecto, conformado por 32 obras de 30 artistas, así como dos gráficas realizadas por los colectivos del taller gráfico del Complejo Cultural Los Pinos y la Brigada Cultural Subversiva, se propone como posicionamiento de la comunidad de artes plásticas frente a los embates de el gobierno estadunidense en el contexto del tratado comercial T-MEC y las trasnacionales de la agroindustria que quieren introducir, posicionar y legalizar la siembra del maíz transgénico para consumo humano; tomando en cuenta la postura del gobierno de prohibir esa siembra y pelear por que no se comercialicen aquí los granos transgénicos”, indicó Gálvez a La Jornada.
Daniel Lezama, Demián Flores, Coral Revueltas, Elsa Madrigal, Éric Pérez, Alberto Castro Leñero, Santiago Robles, Lucio Santiago, Inity García, Triana Parera, Isabel Mendoza, Francisco Quintanar, Silvia Barbescu, Ana Rojas, Joel Rendón y Patricia Soriano son algunos de los artistas que participan en este proyecto.
Exaltación y crítica
Demián Flores comentó en entrevista que su grabado “busca reflexionar sobre el maíz, su importancia simbólica, histórica y cultural. El maíz es una especie domesticada en Mesoamérica. De las 64 razas que existen en México, yuxtapongo tres especies para crear una ‘domesticación’ visual. Por un lado es un guiño a su origen, pero también una crítica a los transgénicos”.
Coral Revueltas participa en la exhibición con una pieza que “hace referencia a la representación de una fanega de granos de maíz; se trata de una medida presente en algunos códices coloniales de tradición prehispánica, quizá como tributo o moneda de cambio, enfatizando así la importancia histórica, cultural, económica y alimentaria por encima del maíz transgénico, que en la imagen está referido con las siglas ‘BT’; es una litografía a dos tintas”.
Elsa Madrigal presenta la pieza Pelando la mazorca, la calavera de un personaje muy mexicano contemporáneo, pero también vinculado con sus raíces. Describió que en la obra, “las alegorías superpuestas remiten a la cueva de Cincalco (La casa de las mazorcas), ubicada en Chapultepec, que era considerada la entrada al inframundo. Ahí, las almas perdían el contacto terrenal e ingresaban al Mictlán: un paraíso lleno de cascadas y manantiales custodiado por Mictlantecuhtli y Mictecacihuatl”.
Desde su creación, una de las líneas de trabajo del taller de grabado del Complejo Cultural Los Pinos ha sido invitar a realizar grabados y litografías con temas específicos de interés para el México contemporáneo. “Es un proyecto excelente; me siento honrado de haber sido invitado”, compartió Éric Pérez.
Gálvez Aguinaga, curador de la exposición, detalló que algunos artistas fijaron una posición crítica a la agroindustria, a los grandes monopolios de los agroquímicos y de las semillas transgénicas, pero también hubo quienes recuperaron mitos en su mayoría indígenas, mientras otros “son poéticas sobre la fuerza cultural de esta planta que se ha convertido más allá de un sembradío de un alimento en algo que nos da identidad”.
Maizal gráfico permanecerá abierto al público hasta finales de noviembre en el Centro Cultural Casa Talavera de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, (Talavera 20, Centro Histórico).