El partido alemán de ultraderecha crea su nueva organización juvenil mientras miles protestan
AP
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Un confiado partido ultraderechista Alternativa para Alemania creó este sábado su nueva organización juvenil, en momentos en que miles de manifestantes se concentraron en la ciudad occidental de Giessen, donde el partido celebraba su reunión; algunos de ellos se enfrentaron con la policía.
Una convención del partido antiinmigración, conocido por su acrónimo alemán AfD, comenzó más de dos horas tarde después de que grupos de manifestantes bloquearan o intentaran bloquear carreteras dentro y alrededor de la ciudad de unos 93.000 habitantes, retrasando la llegada de muchos delegados.
La policía dijo que utilizó gas pimienta después de que se lanzaran piedras a los agentes en un lugar. En otro caso, la policía afirmó que usó cañones de agua para dispersar un bloqueo de unos 2.000 manifestantes después de que estos ignoraran los llamados a retirarse. Lo hicieron de nuevo este sábado por la tarde cuando un grupo intentó atravesar las barreras hacia el centro de convenciones de la ciudad.
La policía informó que hasta 5.000 agentes fueron desplegados y que entre 10 y 15 resultaron levemente heridos. Muchas personas se manifestaron de manera pacífica; la policía estimó el número total de manifestantes, para primeras horas de la tarde, en la “parte baja de cinco cifras”.
Los líderes de AfD condenaron las protestas al inicio de la reunión. “Lo que se está haciendo ahí afuera —queridos izquierdistas, queridos extremistas, tienen que mirarse a sí mismos— es algo profundamente antidemocrático”, dijo la copresidenta del partido, Alice Weidel. Ella afirmó que un legislador de AfD fue atacado; la policía informó que un legislador había sido herido cerca de Giessen, pero no dio detalles.
La predecesora de la nueva organización juvenil, la Joven Alternativa —un grupo en gran medida autónomo con vínculos relativamente laxos con el partido— fue disuelta a finales de marzo después de que AfD decidiera cortar formalmente lazos con ella.
AfD quiere tener una supervisión mucho más cercana sobre el nuevo grupo, llamado Generación Alemania y abierto a todos los miembros del partido menores de 36 años, cuyo estatuto fue aprobado este sábado.
AfD terminó en segundo lugar en las elecciones nacionales de Alemania en febrero con más del 20 % de los votos y es ahora el mayor partido de oposición del país. El partido, con el que los partidos tradicionales se niegan a colaborar, ha seguido creciendo en las encuestas, ya que el Gobierno de coalición del canciller Friedrich Merz no ha logrado impresionar a los votantes.
La agencia de inteligencia interna alemana concluyó que la Joven Alternativa era un grupo probado de extrema derecha. Posteriormente clasificó al propio AfD como tal grupo, pero suspendió la designación después de que AfD presentara un recurso legal.
En una sentencia del año pasado que rechazó la solicitud de una medida cautelar contra la designación de la Joven Alternativa, un tribunal de Colonia argumentó que preservar un pueblo alemán definido étnicamente y la exclusión si fuera posible de los “étnicamente extranjeros” era una idea política central del grupo.
También señaló la agitación contra migrantes y solicitantes de asilo, y vínculos con grupos extremistas como el Movimiento Identitario. En junio de este año, un tribunal superior puso fin al proceso de apelación, señalando que la Joven Alternativa había sido disuelta.
El otro copresidente de AfD, Tino Chrupalla, dijo que el partido debe aprender de errores del pasado.
“Algunos se beneficiaron de los jóvenes, de su capacidad de movilización, pero no tenían suficientemente en cuenta el bienestar y el futuro de esta juventud”, dijo. “Deberíamos haber cuidado más a las nuevas esperanzas jóvenes de nuestro partido; será diferente en el futuro”.
Agregó que los activistas jóvenes deben “ponerse al servicio del partido”.
Es típico que los partidos alemanes tengan filiales juveniles, que generalmente son más políticamente radicales que los partidos principales. Queda por ver si la nueva organización juvenil de AfD será más moderada que su predecesora, aunque se espera al menos cierta continuidad.
Kevin Dorow, delegado del estado alemán de Schleswig-Holstein, dijo que anteriormente fue activo en la delegación local de la Joven Alternativa.
“La nueva formación significa sobre todo continuar lo que inició la Alternativa Joven: ser un terreno de formación, atraer a los jóvenes… y, sobre todo, llevarlos a la política por el bien del partido”, en el cual podrían asumir cargos en algún momento, dijo. Añadió que no había visto ninguna “deriva en una dirección radical” en la Alternativa Joven.
La AfD se presenta a sí misma como una fuerza antisistema en un momento de baja confianza en los políticos. Entró por primera vez al parlamento nacional en 2017 gracias al descontento causado por la llegada de grandes cantidades de migrantes a mediados de la década de 2010, y frenar la migración sigue siendo su tema principal. Pero también ha demostrado ser hábil para capitalizar el descontento respecto a otros temas en los últimos años. Eso se reflejó en el tono confiado de los líderes de la AfD el sábado.
Cinco de los dieciséis estados de Alemania celebrarán elecciones regionales el próximo año. Dos de ellos son en el este excomunista, donde el partido es más fuerte.
“Obtendremos la mayoría de mandatos; proporcionaremos a nuestro primer gobernador”, dijo Weidel.
