Gazprom acelera el transporte de gas por gasoducto a China – – World Energy Trade –
Rusia está acelerando sus exportaciones de gas natural a China a través del gasoducto Power of Siberia, con el objetivo de alcanzar su capacidad máxima a finales de 2024, un año antes de lo previsto.
Gazprom, el gigante energético estatal ruso, ha acordado con China National Petroleum Corporation (CNPC) aumentar los suministros en diciembre, hasta alcanzar la capacidad diseñada del gasoducto de 38.000 millones de metros cúbicos (bcm) anuales.
Este aumento de los flujos de gas refleja el giro de Rusia hacia China, ya que Moscú trata de sustituir a los compradores europeos que perdió tras la invasión de Ucrania.
Según los cálculos de Bloomberg, Gazprom ya ha incrementado las entregas, enviando 20,8 bcm en los ocho primeros meses de 2024, acercándose al total de 22,7 bcm del año pasado.
Además del gasoducto Power of Siberia, Rusia está desarrollando un segundo gasoducto desde el Lejano Oriente, que se espera que añada 10.000 millones de metros cúbicos anuales para 2027.
Sin embargo, las negociaciones para el proyecto Power of Siberia 2, que podría elevar el total de las exportaciones rusas de gas a China a casi 100.000 millones de metros cúbicos anuales, se han estancado por desacuerdos sobre los precios.
La reciente decisión del gobierno de Mongolia de no incluir la financiación de la construcción del gasoducto Power of Siberia 2 en su plan económico quinquenal se ha interpretado en el sentido de que China se está replanteando el proyecto.
Aunque China se ha convertido en el principal cliente energético de Rusia, Beijing se está replanteando su dependencia del gas ruso. Las preocupaciones geopolíticas, el riesgo de dependencia excesiva y el interés de China por diversificar sus fuentes de energía están impulsando esta reconsideración.
A pesar de ello, Rusia sigue deseando aumentar sus exportaciones por gasoducto a China, mientras los mercados europeos siguen contrayéndose por las sanciones y las inversiones en energías alternativas.
Los debates y acontecimientos en curso señalan un cambio significativo en la estrategia energética de Rusia, con China desempeñando un papel central en sus planes futuros.
Con información de Oilprice.