Por qué Sam Altman, CEO de ChatGPT, cobra un «sueldo mínimo»: es más bajo que la mayoría de sus empleados
El sector tecnológico es uno de los más lucrativos, sino el que más, y es que con la digitalización de cada vez más aspectos de nuestra vida y la adopción de las nuevas tecnologías para hacer prácticamente todo, es normal que las empresas del sector muevan miles de millones.
Solo hay que ver que en la lista Forbes de las personas más ricas del mundo, nueve de las 10 más ricas sean personas relacionadas de una manera u otra con la tecnología. La mayoría son CEO de sus compañías, como Elon Musk, Jeff Bezos o Mark Zuckerberg, pero no todos los presidentes ejecutivos se hacen de oro con el éxito de sus empresas, y sino que se lo pregunten a Sam Altman.
A sus 39 años, Altman es CEO y fundador, de una de las compañías más importantes del momento, OpenAI, ya que son los creadores de ChatGPT, el chatbot impulsado por Inteligencia Artificial más famoso del mundo. Uno podría esperar que al estar al frente de una de las compañías referentes del sector y que más éxito han tenido en los últimos años, la compensación por su labor sería notablemente alta.
No obstante, según indica la declaración de impuestos revelados por el Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos, a los que ha tenido acceso exclusivo Bloomberg Altman recibió un salario anual de 76.001 dólares en 2023. Llama muchísimo la atención que una persona que lidera OpenAI reciba tan solo este «sueldo mínimo» mientras que los salarios de otros directivos oscilan entre los 203.000 dólares y los 413.000 dólares anuales.
Al mismo tiempo que el salario medio del estado de San Francisco (EEUU) donde reside Altman es de 126.730 dólares anuales. Ya en sus declaraciones ante el Congreso en mayo de 2023, al ser cuestionado por su sueldo y la falta de acciones sobre OpenAI, Altman aseguró que hacía esto porque le encantaba y que su compensación estaba diseñada para cubrir «lo mínimo necesario para el seguro médico».
Como decíamos, Altman tampoco posee acciones de OpenAI, y el motivo de todo ello es porque dicha compañía nació sin ánimo de lucro. Sin embargo, y por mucho que denuncie Elon Musk, en los próximos meses esto va a cambiar debido a la nueva catalogación de OpenAI, que pasará a ser una empresa cotizada y con un fin puramente lucrativo.
Con este cambio, la directiva podrá recibir paquetes de acciones de la compañía y eliminar restricciones en los beneficios, y según Reuters, el salario de Altman podría incrementarse de una manera astronómica, provocando que su patrimonio (actualmente valorado en 2.000 millones de dólares) pase a los 10.000 millones.