Qué esperar en el proceso político contra el destituido presidente de Surcorea
SEÚL (AP) — El presidente surcoreano Yoon Suk Yeol se ha convertido en el primer líder del país en ser procesado penalmente, menos de dos semanas después de ser el primero en ser detenido.
El presidente destituido y encarcelado, que había permanecido recluido en su complejo presidencial durante semanas después de emitir un sorprendente decreto de ley marcial el mes pasado, ahora enfrenta cargos de rebelión que son punibles con la pena de muerte o cadena perpetua.
Es parte de una saga tortuosa que ha sumido a Corea del Sur en un tumulto político y ha dividido aún más a una sociedad ya fragmentada.
Y no es el único problema legal que enfrenta Yoon. Un procedimiento separado determinará si se le destituye formalmente como presidente o se le restituye.
Mientras Seúl se prepara para dobles audiencias judiciales, protestas caóticas continuas y una retórica cada vez más dura de las fuerzas pro y anti Yoon, esto es lo que se puede esperar a continuación:
¿Qué sucede ahora?
Yoon permanecerá en la cárcel.
Será trasladado desde un centro de detención a un tribunal de Seúl para las audiencias en el juicio por rebelión, que se espera dure unos seis meses.
Los fiscales dicen que Yoon dirigió una rebelión cuando impuso brevemente la ley marcial el 3 de diciembre.
Yoon tiene inmunidad presidencial frente a la mayoría de las acusaciones penales, pero no para cargos de rebelión o traición.
El ministro de Defensa de Yoon, el jefe de policía y varios otros comandantes militares ya han sido arrestados y acusados de rebelión, abuso de poder y otros cargos relacionados con el decreto de ley marcial.
Mientras tanto, es probable que las protestas rivales continúen en el centro de Seúl.
Después de que un tribunal local aprobara el 19 de enero una orden de arresto formal para extender la detención de Yoon, docenas de sus partidarios asaltaron el edificio del tribunal, destruyendo ventanas, puertas y otras propiedades. También atacaron a la policía con ladrillos, tubos de acero y otros objetos. La violencia dejó 17 oficiales de policía heridos, y la policía detuvo a 46 manifestantes.
¿Qué pasa con su otro caso judicial?
Yoon también tiene que preocuparse por el Tribunal Constitucional, que tiene hasta junio para determinar si lo destituye formalmente o lo restituye como presidente.
Los observadores esperan un fallo antes de la fecha límite.
En los casos de dos presidentes destituidos anteriormente, Roh Moo-hyun en 2004 y Park Geun-hye en 2016, el tribunal tardó 63 días y 91 días respectivamente antes de determinar restituir a Roh y destituir a Park.
Si el Tribunal Constitucional remueve a Yoon del cargo, debe haber elecciones para elegir a su sucesor dentro de dos meses.
Las encuestas muestran que los candidatos del partido gobernante y del partido de oposición están empatados en una posible carrera por la elección presidencial.
¿Cómo están tomando la acusación los dos bandos?
Ambos prometen que esto es solo el comienzo.
Shin Dong-wook, portavoz del conservador Partido del Poder Popular gobernante, advierte que los fiscales enfrentarán consecuencias legales y políticas no especificadas por su “errónea acusación” contra Yoon.
El equipo de defensa de Yoon dice que los fiscales que acusaron al presidente están tratando de ganarse el favor de fuerzas políticas que quieren que Yoon se vaya. Llaman a la acusación “una vergüenza en la historia de los fiscales surcoreanos”.
El principal partido de oposición liberal, el Partido Democrático, que lideró la destitución de Yoon el 14 de diciembre, llamó a la acusación y arresto “el comienzo del castigo para el cabecilla de una rebelión”.
El portavoz del partido, Han Min-soo, advirtió a Yoon que detuviera lo que él llamó su intento de incitar a los partidarios de extrema derecha basado en “delirios infundados”.
Yoon ha negado firmemente cualquier delito y dice que su declaración de ley marcial fue un acto legítimo de gobernanza destinado a aumentar la conciencia pública sobre el peligro de la Asamblea Nacional controlada por los liberales, que obstruyó su agenda.
Después de declarar la ley marcial el 3 de diciembre, Yoon envió tropas y policías a la asamblea, pero suficientes legisladores lograron entrar en la asamblea para votar unánimemente en contra del decreto de Yoon, obligando a su gabinete a levantarlo.
La imposición de la ley marcial, la primera de su tipo en Corea del Sur en más de cuatro décadas, duró solo seis horas. Pero evocó dolorosos recuerdos de los regímenes por el ejército que usaron la ley marcial y los decretos de emergencia para suprimir a los oponentes en las décadas de 1960 a 1980.
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Klug reportó desde Tokio
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
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