
Sugieren a Morelos incrementar producción acuícola
En un diagnóstico del sector hecho por el Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables, se plantean cinco acciones remediales a corto, mediano y largo plazo.
Morelos debe incrementar sus Unidades de Producción Acuícola (UPA) y dotar de capacitación a los actuales productores para aprovechar la creciente demanda de estos productos a nivel nacional e internacional, reveló el “Diagnóstico de la acuacultura rural en México (2022-2024)”, realizado por el Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS), dependiente de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural federal.
Según el documento, que realiza un diagnóstico por cada entidad federativa, el sector acuícola morelense enfrenta dos amenazas principales: la existencia de pocas Unidades de Producción Acuícola y el desarrollo de enfermedades de alto riesgo en las especies.
El diagnóstico señala que la entidad mantiene dos debilidades en su sector: altas mortalidades del producto y una baja aplicación de la Gestión de Procesos de Negocio en la producción.
Esta revisión también destaca fortalezas, como el hecho de que en Morelos los acuicultores mantienen una forma de comercialización directa, abasteciendo principalmente al consumo local.
En cuanto a oportunidades, subraya la creciente demanda nacional e internacional de todos los productos acuícolas y la urgencia de darles un valor agregado.
En el trabajo de campo desarrollado durante 2022 a 2024, se recomienda al gobierno de Morelos implementar cinco acciones remediales. A corto plazo: ofrecer capacitación a los productores en las diferentes áreas de producción y en la aplicación de la Gestión de Procesos de Negocio.
A mediano plazo, se sugiere implementar programas de extensionismo en los municipios y diversificar el mercado.
A largo plazo, se recomienda la ejecución de programas de apoyo financiero para infraestructura verde, la adquisición de semilla y contar con un seguro que proteja a los productores ante imprevistos naturales o humanos, con el fin de minimizar el impacto económico en el sector.
Según este diagnóstico, en Morelos la especie que más se cultiva es la carpa, seguida de la tilapia y, en último lugar, diversas especies de ornato.
“La importancia de este diagnóstico radica en que la acuacultura no solo representa una fuente de alimentos de alto valor nutricional, sino que también puede generar empleo, reducir la presión sobre los recursos pesqueros y mejorar la resiliencia de las comunidades ante el cambio climático. No obstante, su éxito depende de la correcta identificación de las necesidades locales y de la implementación de políticas públicas y estrategias de apoyo adecuadas”, refiere la investigación.
Entre sus conclusiones, destaca que: “el diagnóstico confirma la relevancia del sector acuícola como una pieza clave para alcanzar los objetivos de autosuficiencia alimentaria establecidos en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, y que las UPA tienen el potencial de contribuir significativamente al incremento de la producción nacional y la mejora de la balanza comercial agroalimentaria”.
Asimismo, expone que “la baja tecnificación en algunas UPA y los problemas técnicos identificados durante el diagnóstico son obstáculos importantes que limitan la productividad”.
Refiere que la inclusión de pueblos indígenas y municipios con alto grado de marginación no solo contribuye al desarrollo equitativo y a la reducción de desigualdades, sino que también permite integrar conocimientos tradicionales y aprovechar el potencial productivo de regiones históricamente relegadas.
Finalmente, señala que este diagnóstico proporciona una herramienta integral para planificar estrategias y acciones orientadas al fortalecimiento del sector, pues los datos obtenidos, tanto a nivel nacional como estatal, ofrecen información confiable para guiar políticas públicas, programas de apoyo y proyectos de investigación.