INDH Antofagasta realizó conjuntamente seminario sobre los desafíos de la debida …
La instancia fue organizada por el INDH, la Corporación Clúster Minero de la región y la consultora EIS Ambiental y relevó la debida diligencia como una herramienta clave para fortalecer el vínculo entre la industria, el Estado y la comunidad en la región.
Con el objetivo de fortalecer la comprensión y aplicación de la debida diligencia en derechos humanos y medio ambiente, se realizó en Antofagasta el seminario “Desafíos de la Región de Antofagasta para la Debida Diligencia en Derechos Humanos y Medio Ambiente”, que reunió a representantes del sector público, privado, la academia y organismos especializados.
El encuentro fue organizado por la sede de Antofagasta del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), la Corporación Clúster Minero de la Región de Antofagasta y la consultora EIS Ambiental y permitió reflexionar sobre la debida diligencia en los sistemas internos de las organizaciones, a la luz de los estándares internacionales y del contexto regional.
En la actividad se abordó la debida diligencia, como una herramienta que permite a las organizaciones de la industria de distintos rubros a anticipar riesgos, en derechos humanos y ambientales, dependiendo del tamaño y territorio en el cual se localizan. Este enfoque es lo suficientemente flexible para su implementación ya que se aplica considerando las distintas dinámicas internas y externas de las empresas.
El jefe regional del INDH, Paulo Palma, dijo que el encuentro permitió conocer la realidad de otros países en estas materias y el estado actual en Chile de la incorporación de la debida diligencia en derechos humanos, reconociendo sus pilares fundamentales de proteger, respetar y remediar como grandes desafíos para los procesos productivos.
En tanto, el gerente general de la Corporación Clúster Minero, Germán Novoa, reconoció “los aportes positivos que distintas empresas realizan al progreso económico y social de la Región de Antofagasta y al esfuerzo sostenido en resguardar y remediar aspectos relacionados con los estándares en debida diligencia en relación a sus diversas operaciones, este seminario permitirá fortalecer esas capacidades”.
El expositor y consultor internacional, Gustavo Zambrano, enfatizó que la debida diligencia implica planificar y priorizar acciones a partir de matrices de riesgo, lo que permite medir impactos, realizar seguimientos y evaluar resultados. En ese sentido, planteó que incorporar este enfoque en la cultura organizacional no solo contribuye al respeto de los derechos humanos y laborales, sino que también se proyecta como una inversión en la viabilidad futura de los negocios.
Unidad de Estudios del INDH
Sylvana Mariangel, coordinadora de la Unidad de Estudios y Memoria del INDH, expuso el capítulo del Informe Anual 2025 del INDH dedicado a la temática, que aborda por primera vez, desarrollando un esquema sobre el rol del Estado, las principales regulaciones y recomendaciones internacionales y los proyectos de ley actualmente en el Senado, Además, relevó el próximo lanzamiento del Plan Nacional de Acción en Empresas y Derechos Humanos.
Mientras que, en su intervención, el oficial de Derechos Humanos de la Oficina Regional para América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los DD.HH., Sebastián del Pino, explicó que la debida diligencia constituye un proceso preventivo y anticipatorio, que permite evaluar impactos en derechos humanos y ambientales antes de que estos escalen, integrando los hallazgos en la gestión y contribuyendo a la continuidad y seguridad de los negocios.
El jefe de la División de Planificación del Gobierno Regional de Antofagasta, Pablo Rojas, se refirió a la Estrategia Minera Regional de Antofagasta (EMRA), en cuyos orígenes participó OCDE y la cual tiene un modelo de gobernanza orientado al seguimiento de compromisos ambientales, institucionales y productivos de la industria minera en la región. Ello puede permitir complementar a futuro recomendaciones de debida diligencia.
